A partir del año que viene, los divorciados que viven separados de sus hijos podrán deducir en la declaración de la renta la hipoteca de la casa donde viven los niños. La medida, promovida por el Grupo Socialista, con apoyo del Gobierno, será incorporada a través de una enmienda al proyecto de reforma del IRPF, que se tramita en el Senado. El lunes finaliza el plazo para que los grupos presenten sus enmiendas en el Senado.

En la actualidad, un padre o madre separado solo puede deducir en su IRPF las cantidades que abona para pagar la hipoteca de su nueva vivienda habitual. Aunque siga pagando el crédito de la casa donde viven sus hijos con el otro cónyuge, no puede deducir estas cantidades.

Con el cambio legal que se introducirá ahora en el Senado este padre o madre divorciado podrá deducir en el IRPF las cantidades aportadas a ambas hipotecas, aunque eso sí, con el mismo límite, que es de 9.015 euros. Este tope general de la deducción por compra de vivienda habitual no se va a duplicar. "Si lo eleváramos a 18.030 euros tendríamos una lista enorme de divorcios", presumen fuentes parlamentarias.

RÉGIMEN DE ALQUILER Si en lugar de vivir en una nueva casa en propiedad el padre o madre separado vive en régimen de alquiler mientras sigue pagando la vieja hipoteca, podrá empezar a deducir estas cantidades.

Para poder acceder a esta nueva deducción, deberá existir una situación legal de nulidad, divorcio o separación y será imprescindible que los hijos vivan en el antiguo domicilio con el otro progenitor. Esta nueva deducción tendrá un desarrollo reglamentario posterior.