El Banco Central Europeo (BCE) consideró hoy que el reciente encarecimiento del
petróleo es un "recordatorio a tiempo" de los potenciales riesgos inflacionistas
que surgen de los precios de las materias primas. En su boletín de agosto,
publicado hoy, el BCE afirmó que las principales presiones para la estabilidad
de precios en la zona del euro están relacionadas, sobre todo, con factores
internos.
El banco europeo destacó que, "dado que la utilización de los recursos de la
economía es alta y el empleo crece fuertemente, surgen constricciones de las
capacidades que pueden dar lugar a dinámicas más fuertes de lo esperado en los
salarios y los costes". Además, el BCE dijo que "la fuerza de los precios en
segmentos del mercado con un nivel bajo de competitividad pueden incrementar los
márgenes de beneficio" de las empresas.
La entidad advirtió de que estos desarrollos pueden crear "significativos
riesgos al alza para la estabilidad de precios", por lo que instó a todas las
partes a que "cumplan sus responsabilidades". "La fuerza de la tasa subyacente
de la expansión monetaria confirma la existencia de riesgos al alza para la
estabilidad de precios a medio y largo plazo", aseguró el BCE.
Al mismo tiempo, la entidad apuntó que posibles aumentos adicionales en los
precios administrados y los impuestos indirectos, así como "el potencial
carácter pro-cíclico de la política fiscal en algunos países" también pueden
crear presiones inflacionistas.
La entidad consideró que, "dado el positivo entorno económico de la zona del
euro, la política monetaria del BCE continúa del lado expansivo", con unas
condiciones de financiación favorables, un crecimiento monetario y del crédito
vigoroso y una amplia liquidez.
El BCE mantuvo el precio del dinero para los países que comparten el euro en
el 4 por ciento la semana pasada. "De cara al futuro, está garantizada una
actuación firme y a tiempo para asegurar la estabilidad de precios a medio
plazo", afirmó la institución europea.