La Reserva Federal de Estados Unidos ha mantenido los tipos de interés estables por primera vez desde el pasado septiembre. Como ya se esperaba, la institución presidida por Ben Bernanke ha decidido mantenerlos en el 2%, centrando el mensaje de su última reunión de política monetaria en las dudas sobre la evolución de la inflación. Además, Bernanke ha dejado abierta la posibilidad de una posible subida del precio del dinero.

En este sentido, el banco central estadounidense señaló ayer que tomará las medidas necesarias para garantizar un crecimiento sostenible en un contexto de estabilidad de precios. En cuanto a la decisión sobre los tipos, algunos expertos como el antecesor de Bernanke, Alan Greenspan, se han mostrado escépticos sobre la evolución de la economía americana. Horas antes del anuncio de la Fed, Greenspan volvió a asegurar --esta vez desde Suráfrica-- que la primera economía del mundo está al borde de una recesión económica.

Tampoco los empresarios confían en una evolución positiva, como demuestran los resultados de la Conference Board: su confianza está en el nivel más bajo de los últimos 16 años y no creen en una rápida recuperación económica.

Los tipos de interés estaban en el 5,25% hace nueve meses. Entonces la Reserva Federal inició un periodo de recortes que no ha parado hasta ahora, cuando los ha mantenido en el 2% en un intento de ganar la confianza perdida de los consumidores, cuyo gasto representa dos tercios del PIB estadounidense.

LA DIVISA, A LA BAJA La Reserva Federal ha inyectado 500.000 millones de dólares a la economía americana desde diciembre, que aun así apenas se mueve. Además, los bajos tipos de interés contribuyen a la depreciación del dólar frente a las monedas de sus principales socios comerciales, lo que encarece las importaciones de petróleo y dispara los precios de la gasolina que tanto preocupan al consumidor americano.

La esperada decisión de la institución monetaria tras dos días de reuniones llega en un momento en el que muchos economistas se centran más en la inflación que en el parón económico. Algunos predicen que la Reserva Federal necesitará pronto volver a subir los tipos para controlar la subida de los precios.

El presidente de la Reserva Federal de Dallas, Richard Fisher, fue el único de los 10 miembros del comité de mercado abierto que votó por aumentar los tipos. En su comunicado, la Fed espera que las presiones inflacionistas cedan a finales de año, pero advierte del repunte de los precios causados por el alza del petróleo. Debido al continuo aumento de esos precios "ha aumentado el riesgo de inflación y las futuras previsiones inflacionarias se han incrementado", apunta la Fed.