Las vacaciones son para desconectar de muchas cosas, pero no de internet. Así lo piensan cada vez más veraneantes que no dejan de navegar por la red, aunque estén en la playa, la piscina, una terraza o en un hotel. Los módems USB, que permiten conectarse a internet desde el portátil prácticamente en cualquier lugar, han experimentado un auge en los últimos meses. En especial, la modalidad de prepago, que hasta hace poco era muy minoritaria y por la que ahora apuestan todas las grandes operadoras.

Según los últimos datos de la Comisión del Mercado de Telecomunicaciones (CMT), las líneas de acceso a internet móvil aumentaron en el primer trimestre el 72,6% anual. En marzo había, según el regulador, 1,3 millones de usuarios de banda ancha por redes móviles (de contrato y prepago). Es de prever que la cifra sea hoy más elevada.

Vodafone --la operadora líder en este segmento, con el 46,1% de cuota de mercado, seguida de Movistar--, aumentó el 20,9% los ingresos por conectividad PC móvil en el primer trimestre del año fiscal (que acabó el 30 de junio). Orange aumentó sus clientes de Internet Everywhere en el primer semestre hasta los 246.000, frente a los 111.000 del mismo periodo del 2008. Telefónica no ha facilitado cifras.

MÁS PEQUEÑOS La evolución del propio módem USB ha sido un factor clave en su difusión, según fuentes del sector. Ahora estos dispositivos son más pequeños y fáciles de transportar y tienen nuevas funcionalidades, como la posibilidad de incorporar tarjetas de memoria micro SD. "En cinco años, pasará igual que con el teléfono móvil, que empezó siendo un pequeño lujo y ahora lo tiene todo el mundo", opina Isaac Hernández, director de servicios de banda ancha de Vodafone. Fuentes de Telefónica coinciden: "Igual que sucedió con la voz hace 12 años, ahora internet se está haciendo móvil. Hay muchas cosas para las que ya no podemos esperar a llegar a casa y conectarnos". Bartolomé Salas, director de servicios y contenidos de Orange, afirma que, "aunque se ha dado un salto importante, hay cancha por recorrer", porque hay gente que no conoce este servicio.

Los operadores distinguen entre dos tipos de clientes de internet móvil: los más intensivos, que se conectan cada día, y los esporádicos, que suelen navegar pocas veces a la semana, o solo cuando están de viaje o en sus segundas residencias. Para los primeros, lo más adecuado son las tarifas de contrato, mientras que para los segundos lo mejor es el prepago: no hay compromiso de permanencia y, una vez agotado el saldo, se recarga (como las tarjetas de móvil).

Vodafone fue pionera en ofrecer internet móvil de prepago, en agosto del 2005. Este año, Telefónica, Orange y Yoigo han lanzado sus propias soluciones.