Al menos siete autonomías se han sumado a la campaña de requerimientos a titulares de cuentas en el banco HSBC de Suiza iniciada hace unos días por la Agencia Tributaria. Son las autoridades tributarias autonómicas de la Comunitat Valenciana, Cataluña, Madrid, Navarra, Asturias, Baleares y Castilla y León, según confirmaron ayer fuentes a la Agencia Tributaria. La Comunidad de Madrid y Cataluña encabezan la cifra de implicados, con más de 500 entre ambas, según la información.

La comunidades persiguen recuperar activos que los implicados deberían haber declarado en el impuesto del patrimonio. Aunque se trata de un gravamen cedido a las autonomías que en la actualidad no está vigente, la campaña de requerimientos afecta a los ejercicios 2005, 2006, 2007 y 2008, en los que aún había que declararlo.

Las primeras estimaciones sitúan en unos 1.500 la cifra total de titulares de las 3.000 cuentas en el banco suizo.

A pesar de que tanto la vicepresidenta económica, Elena Salgado, como el director de la Agencia Tributaria, Juan Manuel López Carbajo han insistido en que los implicados pueden acabar con sanciones si es que no declararon lo que debían, la campaña de requerimientos ha provocado un alud de críticas.

Muchas de ellas proceden de la propia Administración Tributaria y de los inspectores y técnicos de Hacienda, que consideran la fórmula empleada "un trato de favor" para personas acaudaladas. Incluso han llegado a insinuar que se trata de "una amnistía fiscal encubierta".

Las autoridades fiscales autonómicas han iniciado un procedimiento similar al del Estado, aunque en algunos casos no se descarta hacerlo por la vía inspectora, lo que puede desembocar en un expediente por delito fiscal. Para ello, la cuota defraudada debe superar los 120.000 euros y, en su caso, puede acabar con una pena de cárcel.