Empresas españolas firmaron ayer acuerdos con compañías rusas por valor de unos 800 millones de euros. Todo ello se hizo en el marco del encuentro del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el jefe del Estado ruso, Dmitri Medvédev, quienes apostaron por intensificar la cooperación económica entre ambos países. Los acuerdos implican a Repsol, Talgo y Gestamp.

Estos convenios fueron uno de los ejes de la visita a San Petersburgo de Zapatero, invitado por Medvédev a participar en la clausura del Foro Económico Internacional que organiza la ciudad anualmente. El acuerdo más relevante es el suscrito por el presidente de Repsol, Antonio Brufau, ya que implica una inversión de casi 600 millones de euros para crear una compañía mixta con la rusa Alliance y cooperar en los campos de esta petrolera en la región de Samara y en la república de Tatarstán.

Pero el más costoso ha sido el que implica el desembarco de Talgo en Rusia, que es el fruto de años de negociaciones. La compañía controlada por la familia Oriol vende siete trenes de pasajeros por importe de cerca de 130 millones de euros.

Se trata de un contrato de suministro para la empresa ferroviaria del país RZD. El acuerdo, fruto de 15 años de contactos entre las dos empresas, se firmó en San Petersburgo. En un comunicado, Talgo avanzó su intención de implantarse en este país con el fin de realizar servicios de mantenimiento integral en colaboración con RZD. Con este contrato, el fabricante español entra en "uno de los mayores mercados ferroviarios del mundo" y refuerza su internacionalización. En la actualidad, Talgo está ya en EEUU, Alemania, Kazajstán, Uzbekistán y Bosnia.

RUTAS DESDE MOSCÚ Según este pedido, Talgo diseñará, fabricará y suministrará tres trenes a los ferrocarriles rusos para la ruta Moscú-Berlín. Los vehículos contarán con sistema automático para adaptar sus rodadura a los distintos anchos de vía de la red ferroviaria rusa. También suministrará otros cuatro trenes para la ruta Moscú-Kiev.

Todos los trenes pueden circular a una velocidad de 200 kilómetros por hora y combinan plazas para viajar en coches-cama y sentados. Talgo asegura que el modelo que suministrará a Rusia es uno de los "más modernos y más respetuosos con el medio ambiente para los servicios de alta velocidad y larga distancia". Según sus datos, los coches están fabricados en aluminio, "lo que permite conjugar la ligereza, la seguridad y el bajo consumo energético". El fabricante destaca que el sistema de pendulación natural de los trenes "permite mayores velocidades en curva y sistema de suspensión neumática, que ofrece máximo confort al pasajero".

Por su parte, Gestamp, firma de componentes del automóvil, ha cerrado un acuerdo de exenciones fiscales con el Gobierno de Leningrado y otro con la república de Tatarstán para construir una planta con una inversión de hasta 50 millones.

Zapatero y Medvédev coincidieron en que los intercambios comerciales no están a la altura del peso de las dos economías y se comprometieron a facilitarlos en sectores de interés mutuo, como el gas, el petróleo, las infraestructuras y los transportes. Fuentes del Ejecutivo español destacaron a Efe el interés en participar en los proyectos de Rusia como organizador del Mundial de Fútbol en el 2018, desde carreteras y líneas ferroviarias a hoteles y sistemas de telecomunicaciones.