Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea (UE) han iniciado este jueves una cumbre de dos días en Bruselas entre llamamientos al Gobierno y a la oposición griegos a favor de un consenso sobre el nuevo conjunto de ajustes económicos pactado con sus socios internacionales. Los líderes celebran una cena de trabajo en la que Grecia figura como plato principal de un menú esencialmente económico. En la antesala de la reunión se han intensificado las presiones sobre los principales partidos griegos para que garanticen la aprobación parlamentaria del nuevo conjunto de medidas de austeridad y privatizaciones propuesto por el Ejecutivo del primer ministro griego, el socialista Yorgos Papandréu."No hay un plan b. Grecia tiene que hacer lo que tiene que hacer y entonces nosotros haremos lo que tenemos que hacer", ha dicho a su llegada al encuentro el presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker. Los socios europeos han acordado conceder a Grecia el quinto tramo del rescate pactado el año pasado (12.000 millones de euros) solo si introduce esos nuevos ajustes. Los llamamientos van tanto para los socialistas --en cuyas filas no todos apoyan las tesis del Gobierno-- como para la oposición conservadora, que se sigue mostrando contraria al nuevo paquete de austeridad. "En lo que respecta a Grecia, quiero apelar a la oposición a que haga honor a su responsabilidad histórica", ha afirmado la cancillera alemana, Angela Merkel, a su llegada a la cumbre. El primer ministro sueco, el también conservador Fredrik Reinfeldt, ha considerado por su parte "muy importante que todo político griego asuma su responsabilidad". "Hay mucho que hacer en Grecia y no hay una salida fácil", ha advertido. El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, ha llegado a Bruselas para participar en el Consejo Europeo con el aval que logró en el Parlamento, gracias a la abstención de los nacionalistas, para la reforma de la negociación colectiva. Esta fue una de las medidas que en la última cumbre de la Unión Europea, en marzo, se comprometió a sacar adelante como demostración de que es firme la apuesta de España por el pacto del euro y para fortalecer las bases de la economía.