Las ventas de automóviles cerrarán el mes de junio con un volumen de unas 85.000 unidades, lo que supondrá una caída del 30% en comparación con el mismo mes del 2010, el mayor retroceso del año y el décimo segundo descenso mensual consecutivo. En los seis primeros meses del año las matriculaciones de turismos y todoterrenos se situarán en torno a 444.000 unidades, cifra inferior en un 26,5% a la contabilizada en el mismo periodo del ejercicio precedente. Con ello, el mercado automovilístico español retrocede a niveles de 1993, dado que en el primer semestre de aquel año se vendieron 401.000 coches. Además, las ventas han caído un 50% respecto del 2007, el último año previo a la crisis. En el canal de particulares, la caída es más pronunciada y alcanza el 60%. Se da la circunstancia de que en los seis primeros meses del 2007 se vendieron en España 852.000 vehículos, cifra similar a la prevista por las principales asociaciones del sector para todo este año (entre 850.000 y 900.000 coches). A falta de dos días hábiles para el cierre de junio, las matriculaciones de automóviles se situaban en 67.000 unidades, lo que se traduce en un descenso del 30% en comparación con idéntico periodo del ejercicio precedente. La caída se ha cebado especialmente con el canal de particulares, que cae cerca del 50% con apenas 28.400 matriculaciones. Por su parte, las ventas a empresas entran en terreno negativo con una disminución del 1% y 19.400 unidades, mientras que las compras por parte de alquiladores bajan un 6%, con 19.250 unidades. Las fuentes consultadas consideran que a partir de julio los datos serán más favorables, pero no por una recuperación real, sino porque se comparan con los volúmenes extraordinariamente bajos del segundo semestre del 2010, periodo en el que el mercado acusó el fin del Plan 2000E y la subida del IVA del 16% al 18%.