El sector publico británico amenaza con nuevas huelgas en otoño. En el paro de ayer participaron cuatro fuerzas sindicales, tres de ellas de maestros. El mayor sindicato de funcionarios, Unison, se mantuvo sin embargo al margen, a la espera de ver el rumbo que toman las negociaciones. Unison representa a 1,3 millones de empleados, en organismos locales, sanidad, enseñanza superior y la policía. Su líder, Dave Prentis, ha advertido de que podrían ir a la huelga, si el Gobierno les sigue tratando "con desdén".