Pocas empresas pueden presumir de haber creado un millar de empleos en el 2011 y de prever generar otros tantos puestos de trabajo en los próximos 12 meses. Desigual sí puede. La firma de moda catalana ha conseguido sortear la crisis, con unas cifras de ventas que no dejan de crecer y la previsión de aperturas de tiendas. Para este año, destinará más de 100 millones de euros en diversos proyectos de expansión, incluidos 60 nuevos establecimientos, el traslado a la futura sede y el inicio de las obras de un centro logístico. Todo con una "estrategia de deuda cero", explicó ayer el consejero delegado, Manel Adell.

Para Desigual, la receta del éxito se basa en la diversificación en producto y la expansión internacional. Por eso, la compañía se esforzará en asaltar otros mercados, especialmente el asiático. Antes del verano abrirá su primera tienda china en Shanghái, además de oficinas en Hong Kong y una plataforma logística, esta última con el operador chino Kerry como socio.

Desigual facturó 560 millones de euros en el 2011, el 27% más que el año anterior, de los que solo el 31% provino de España. Para el 2012, prevé aumentar la cifra de negocio al menos otro 20%. Si el ritmo de ventas sigue igual, el centro logístico que la compañía tiene actualmente en Gavà (Barcelona) se quedará pequeño. Por eso, tiene proyectada la compra de un solar de 80.000 metros cuadrados para construir un centro logístico que cuadruplique la capacidad del actual.

El otro gran proyecto de Desigual es el traslado de las oficinas centrales, a partir de noviembre, a un edificio de 20.000 metros cuadrados junto al Hotel W de Barcelona.

En el apartado de la moda, la empresa desfilará por primera vez en la Pasarela 080 Barcelona Fashion la semana que viene. En ella presentarán su colección propia y dos nuevas líneas de productos con motivos de Disney y Michael Jackson.