El recibo de la luz volverá a subir en abril por primera vez desde julio del año pasado. Y ello a pesar de que la subasta que cuantifica la variación del precio de la energía arrojó ayer un descenso de en torno al 7% del coste de la electricidad. Sin embargo, esta subasta fija solamente la mitad de la tarifa. La otra --los peajes, con los que se pagan conceptos que van desde el mantenimiento de la red hasta las primas que se aplican a las energías renovables-- la decide el Gobierno central, que ya ha anunciado que tiene que subirla para cumplir con unas sentencias recientes del Tribunal Supremo (TS), que juzgó incorrectas las congelaciones de las tarifas amañadas por el Ejecutivo en octubre y enero.

MARGEN PARA INDUSTRIA El abaratamiento de la energía, eso sí, ha dado algo más de margen al Ministerio de Industria, Ener-gía y Consumo para elevar los peajes con un menor impacto sobre el recibo final que pagan más de 20 millones de hogares. Según sostiene la patronal de las eléctricas, Unesa, la parte regulada debería experimentar una subida del 30% para cumplir con las resoluciones del Tribunal Supremo, con lo que la luz se incrementaría en un 15%. Sin embargo, el departamento que dirige José Manuel Soria ya ha descalificado estos cálculos y ha advertido a la asociación de que no le impondrá sus criterios.

Es decir, que la luz no subirá tanto, con bastante probabilidad. El propio ministro confirmó ayer que, si bien "las sentencias están para cumplirlas", su departamento no tiene ninguna intención de hacer "recaer todo el peso del ajuste en las espaldas del consumidor". Con más de cinco millones de parados, argumentó en la cadena SER, no es aceptable "una subida excesiva en ninguna tasa, y eso incluye la factura de la luz".

MITIGAR EL IMPACTO Así las cosas, gana puntos la posibilidad de que el Gobierno de Mariano Rajoy apruebe alguna medida para suavizar la subida del mes que viene. Quizá se adopte en la reunión del Consejo de Ministros de mañana, ya que Industria tiene hasta el sábado para publicar la variación de la tarifa en el Boletín Oficial del Estado (BOE). Algunas fuentes aseguran que el ministerio podría elevar el tope de 1.500 millones de euros el déficit de tarifa (desfase entre los costes y los ingresos de las eléctricas para prestar el servicio) previsto para este año.