La sudadera azul que Mark Zuckerberg eligió para el momento de hacer sonar ayer la campana de inicio de la sesión del mercado Nasdaq resume la filosofía del fundador de uno de los mayores gigantes tecnológicos. Explota la imagen de juventud --cumplió 28 años el lunes--, sencillez y aparente informalidad que predomina en Silicon Valley, la región de California donde están las grandes tecnológicas, incluida la suya, Facebook.

También con sudadera oscura aparece en el perfil que le dedica la web de Forbes, que en marzo estimó su patrimonio neto en algo más de 13.740 millones de euros y que lo situó en el puesto 35° de la lista de los más ricos del mundo. La publicación sintetiza con dos palabras las fuentes de su riqueza: Facebook y self-made (hecho a sí mismo).

Hijo de un dentista y una psiquiatra de Nueva York, Zuckerberg se inició en la programación informática a los 11 años. A los 19, cuando estudiaba en Harvard, fundó con tres compañeros una web para los estudiantes. Thefacebook se convirtió en tal éxito que Zuckerberg dejó los estudios para dedicarse a la compañía. Dos años después, Yahoo hizo una oferta de compra por 850 millones de dólares, que rechazó.

En el 2010, el responsable de que millones de personas hayan cambiado sus hábitos sociales vivió lo mejor y lo peor de la fama: la revista Time lo nombró persona del año y David Fincher estrenó La red social, filme que muestra a un Zuckerberg egoísta y antipático. Y narra un episodio oscuro: la acusación de que el hoy multimillonario dueño de Facebook robó la idea a unos compañeros de Harvard.

Reacio a salir en la prensa, se sabe que viajó a Vietnam con su novia, Priscilla Chan; que compró una mansión en Palo Alto (California) y que su perrito se llama Beast. En su perfil de Facebook, con 13,7 millones de seguidores, dice que le gusta La guerra de las galaxias y cita como frase preferida "La fortuna favorece a los audaces", de Virgilio.

Algunos asocian su juventud con inmadurez. No lo debe de pensar así el presidente Barack Obama, que en abril del 2011 visitó las oficinas de la red social que le ayudó en su carrera a la Casa Blanca. En aquella ocasión, Zuckerberg eligió corbata.