La huida de los inversores extranjeros de la deuda pública española es creciente. En los cuatro primeros meses del año el volumen de deuda pública en manos de inversores extranjeros ha bajado en 68.011 millones de euros hasta situarse en 213.428 millones, el 24% menos que en diciembre. Si se compara con abril del 2011, la caída se eleva a 76.340 millones (el 26% menos).

A finales del 2011, los inversores extranjeros eran titulares de algo más del 50% del total de deuda del Estado en circulación. En abril, según datos del Tesoro, este porcentaje se ha reducido al 37,31% sobre un total de 572.61 millones de euros.

Las entidades financieras españolas han compensado el declive de la inversión extranjera en títulos. El total de deuda pública del Estado en manos de la banca ascendió a finales de abril a 167.250 millones de euros, 72.872 millones más que en diciembre del 2011, lo que supone un incremento de nada menos que el 77,2%. Si se compara con abril del 2011 el volumen de deuda en manos de la banca se ha multiplicado por 2,5.

Buena parte de la liquidez captada por la banca española en el Banco Central Europeo (BCE) al 1% de interés ha sido utilizado por las entidades al comprar deuda pública española en un momento en el que el Tesoro se está viendo obligado a pagar precios más altos por la presión de los mercados financieros.

EL BONO, AL 6,31% Ayer mismo, el precio del bono español a diez años superó el 6%, llegando al 6,31%, en una jornada en la que la prima de riesgo (diferencia de precio entre el bono español y el alemán, considerado como el más fiable) cerró en 494 puntos. Este indicador había iniciado la jornada en el nivel de los 457 puntos. Después, las dudas sobre el futuro de Grecia y la alarma creada por el presidente de la Generalitat catalana, Artur Mas, respecto a las dificultades de financiación de Cataluña llevaron a la prima de riesgo a su cierre más alto desde la entrada del euro (la semana pasada llegó a superar los 500 puntos básicos durante la sesión, no al cierre).

La bolsa española, que empezó la jornada con ganancias cercanas al 1% pese a la incertidumbre por la suspensión de cotización de Bankia, cerró la sesión en positivo, pero con un avance de apenas el 0,13%.

SÍNTOMAS DE AGOTAMIENTO Con todo, el papel de la banca española en la compra de deuda del Estado empieza a dar síntomas de agotamiento. El nivel de títulos en su poder registrado en abril (167.250 millones de euros) fue ligeramente inferior al de marzo (170.611 millones).

En porcentajes, la deuda del Estado en circulación corresponde en un 37,3% a los inversores extranjeros y en un 29,24%, a las entidades financieras. El tercer grupo, en orden de importancia, es el de las administraciones públicas, con el 14% (80.081 millones). En este grupo computan las inversiones del Fondo de Reserva de la Seguridad Social, cercano a 67.000 millones.

Por lo demás, el 6,18% de la deuda del Estado está en manos de aseguradoras españolas; el 3,10% corresponde a fondos de pensiones y el 5,53% a fondos de inversión. El grupo de "otras entidades financieras" ostenta el 1,28% de los 572.061 millones de deuda del Estado en circulación, y las empresas, el 2,44%. Los inversores particulares solamente poseen el 0,93% del total, muy lejos del 14,84% que copaban en 1995. En su planificación inicial para este año, el Tesoro prevé cerrar el año con un volumen de deuda del Estado de 628.900 millones de euros.