El descrédito azuzado por el Gobierno contra la gestión del gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, de la reforma del sector financiero ha acabado por hacerse insoportable para este. Fernández Ordóñez pidió reunirse con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y ayer por la tarde, le comunicó su decisión de adelantar la fecha de cese en su cargo al 10 de junio, en lugar del 12 de julio, que es cuando acaba el mandato para el que fue designado por el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero.

En el Gobierno de Rajoy cundió un respiro de alivio. Nadie quería dar el último empujón a Fernández Ordóñez, pero todos querían un nuevo gobernador cuanto antes para encarar las próximas semanas, críticas para la reforma del sistema financiero español. La decisión de Fernández Ordóñez "facilita una transición ágil y eficiente" en la institución, se apresuró a valorar la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, informa Pilar Santos.

RESPONSABILIDADES La cohabitación entre el Gobierno del PP y el alto cargo nombrado por Rodríguez Zapatero fue incómoda desde el inicio. El ambiente se hizo irrespirable a raíz del estallido de Bankia, entidad que tuvo que ser nacionalizada días después de que el Banco de España diera su aprobado al plan presentado por el expresidente de la entidad, Rodrigo Rato.

El Ejecutivo del PP cargó sobre el gobernador la responsabilidad del caso Bankia y por ende del fracaso en la reestructuración del sistema financiero que hoy se percibe como detonante de un posible rescate del país por parte de Europa y el FMI.

La gota que ha colmado el vaso en los últimos días ha sido el conocimiento de una carta que la Asociación de Inspectores del Banco de España remitió a Rajoy el 16 de mayo reclamando, entre otras cuestiones, "el urgente relevo" del gobernador y del subgobernador "de modo que se elimine cualquier tacha de politización en la gestión de la institución". Fuentes de Economía anunciaron que en los próximos días se dará a conocer quién será el nuevo gobernador, un cargo para el que suena el nombre del exdirector general del Banco de España, Luis María Linde. Para el PSOE, este nombre no plantea problemas ya que, según fuentes socialistas, tiene una experiencia profesional probada "y no está muy vinculado al PP".

NUEVA ETAPA La noticia del cese del gobernador fue comunicada en una nota oficial del Banco de España difundida a las 18.37 horas. La fecha del 10 de junio elegida para el cese no es casual. Para entonces, el gobernador ya habrá presentado el informe anual y la liquidación del presupuesto del 2011 de la entidad. Además, el 11 de junio --fecha en la que el sucesor ya podrá estar incorporado-- finaliza el plazo para que las entidades presenten al organismo regulador los planes para cumplir la última reforma financiera del Gobierno. A finales de junio, deben acabar los trabajos de las consultoras privadas contratadas por el Gobierno para valorar la solvencia del sistema financiero español.

Tras conocerse el cese de Fernández Ordóñez, el grupo parlamentario del PP encontró el argumento perfecto para justificar su negativa a la comparecencia del gobernador en la subcomisión que supervisa el uso de ayudas públicas en el sector financiero. Fernández Ordóñez sí acudirá hoy a su tradicional comparecencia ante la Comisión de Presupuestos del Senado, donde la oposición le preguntará sobre Bankia y él podrá contestar, si quiere.