La cancillera alemana, Angela Merkel, no está dispuesta a ceder en la posibilidad de que la Unión Europea otorgue ayudas a la banca española de manera directa, una fórmula que ayudaría a evitar la contaminación de la deuda soberana. Merkel ha sido clara y contundente y ha dicho que el Gobierno español debe responder de la ayuda que los bancos recibirán de los fondos europeos.

"No es que yo quiera eso, es que los tratados están hechos de esta manera", ha afirmado la dirigente alemana tras la minicumbre celebrada en Roma, entre los líderes de Alemania, Francia, Italia y España. Merkel ha explicado que esta es la manera de proceder porque solo el Ejecutivo de cada país tiene competencias sobre sus entidades bancarias, solo ese Ejecutivo puede decirles a los bancos qué tienen que hacer.

Estas palabras de Merkel pronunciadas a escasos tres metros de Mariano Rajoy en la rueda de prensa conjunta que ambos han dado junto con el presidente francés, François Hollande, y el primer ministro italiano, Mario Monti, llegan horas después de que el ministro de Economía, Luis de Guindos, insistiera ante sus homólogos en Luxemburgo que todavía es posible que las entidades españolas con problemas reciban directamente el préstamo de hasta 100.000 millones.