El Banco Sabadell está dispuesto a negociar caso a caso la situación de los clientes con cláusulas suelo. «Ya lo hemos hecho con anterioridad a que se aprobara el decreto de solución extrajudicial y lo seguiremos haciendo», confirmó ayer el presidente del banco, Josep Oliu, durante la presentación de los resultados del 2016. La entidad ha propuesto a los clientes con cláusula modificar su contrato a uno nuevo de tipo fijo y, según reconoció el responsable financiero de la entidad, Tomás Varela, el 50% de las hipotecas que tenía cláusula se han pasado a tipo fijo.

El banco sostiene que aunque está dispuesto a negociar, sus «hipotecas son transparentes» y fueron comercializadas con el conocimiento del cliente, así que no va a devolver el dinero en esos casos. «Si el cliente quiere ir al juzgado que vaya», comentó Oliu, quien no cree, sin embargo, que esa posible litigiosidad vaya a tener un coste reputacional para el banco.

«Queremos hablar uno a uno con los clientes para cerciorarnos de que conocía o no la cláusula», y en los casos en los que quede claro que la cláusula es transparente, no se devolverá el dinero. Otra cosa, reconoció Oliu, son las hipotecas que proceden de entidades absorbidas, como Caixa Penedès o Guipuzcoano. «Si está claro que esas hipotecas no se comercializaron con transparencia» habrá que devolver el dinero, apuntó.

Oliu realizó estas declaraciones durante la presentación de resultados de la entidad, que ha obtenido un beneficio de 710,4 millones de euros en el 2016, el 0,3% más que el año anterior, tras realizar dotaciones extraordinarias que incluyen el posible impacto de las cláusulas suelo. El margen de intereses fue de 3.837,8 millones de euros el año pasado, lo que supone un incremento del 19,8% interanual, y el ratio de capital CET1 fully loaded alcanzó el 12%, frente al 11,4% del 2015.