La homofobia sigue invisibilizada y sin salir del armario para ser combatida en las empresas españolas. Únicamente en el 4% de las compañías se han producido denuncias contra actitudes de acoso contra un trabajador por su orientación o identidad sexual en los últimos cinco años, tal como constata un informe de UGT. Pese al residual porcentaje de denuncias, más de uno de cada tres trabajadores ha presenciado o tiene constancia de que en su centro de trabajo se han producido este tipo de ataques. «Vemos como los derechos formales y reconocidos no se traducen todavía en una igualdad real para el colectivo LGTBI», declarado la sindicalista Eva Gajardo.

El informe de UGT ha sido presentando un día antes del Día Internacional contra la LGTBIfobia, que se celebra. En España se registraron en el 2017, últimos datos disponibles, un total de 629 incidentes y delitos de odio por motivo de orientación sexual y/o expresión e identidad de género, según el informe «La cara oculta de la violencia» de FELGTB.

La diversidad sexual y la sensibilidad respecto a esta es algo con mayor impacto entre las generaciones más jóvenes. Así lo constatan los datos, ya que mientras el 36% del total de las 781 personas encuestadas afirman haber percibido o presenciado una actitud LGTBIfóbica en su empresa, dicho porcentaje escala hasta el 43% entre los jóvenes de entre 18 y 34 años. El ataque más frecuente detectado por UGT es la broma (68% del total), seguida por el insulto (14%) y estos vienen más frecuentemente de un compañero o compañera de trabajo, que realizan el 66% de las agresiones, seguidos por un superior (17%). «El 14% de los agresores que hemos detectado vienen de fuera de la empresa, como proveedores o clientes, lo que debemos tener muy en cuenta a la hora de diseñar los protocolos de acoso»,.

El 36% de los delegados sindicales encuestados afirma ser conscientes de agresiones, pero solo el 8% afirma haber recibido algún tipo de consulta.