Naturgy registró un beneficio neto de 901 millones de euros hasta septiembre, no comparable con los resultados del año anterior, cuando la energética registró unas pérdidas contables por valor de 3.040 millones de euros debido al ajuste de activos, especialmente de las centrales térmicas, de 4.900 millones.

Según ha informado la energética a la CNMV, sin tener en cuenta los elementos no recurrentes, el beneficio neto ordinario del grupo fue de 991 millones de euros (un 13% más), mientras que el resultado bruto de explotación (Ebitda) se elevó hasta los 3.290 millones de euros (un 10,6% más).

La compañía supera, así, las previsiones de los analistas que estimaban un Ebitda promedio reportado de 3.267 millones de euros y un beneficio neto de 893 millones de euros. Y todo a pesar de "la falta de crecimiento de los negocios regulados y de la ralentización de los negocios liberalizados en un escenario energético más adverso que el del ejercicio anterior", según explica en un comunicado.

Este récord de resultados llega mientras Naturgy espera para conocer en qué quedará el recorte previsto por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) para sus actividades reguladas de distribución de gas natural. El regulador propuso un 'hachazo' del 21,8% que la compañía rechaza y que está a punto de dirimirse en la sala de regulación de la autoridad pública, antes de ser enviado al Consejo de Estado para su aprobación.

Por negocios, en la comercializadora Gas & Power registró un Ebitda ordinario de 964 millones, un 3,9% menos, "a pesar del sólido desempeño de las ventas de gas, electricidad y servicios, así como de la generación internacional de energía".

RENOVABLES

La compañía que preside Francisco Reynés presume en su nota de resultados de la inversión hecha en estos últimos nueve meses en proyectos renovables. En concreto, la empresa ha invertido cerca de 400 millones de euros, la mayor cifra de su historia.

En su conjunto, la compañía ha invertido más de 1.100 millones de euros en el periodo, que se han destinado principalmente al desarrollo de proyectos renovables, donde destacan los 290 megavatios de proyectos solares y eólicos puestos en operación en España. La capacidad instalada en España asciende a cerca de 1.500 megavatios, un 25% más.