El Periódico Mediterráneo acoge el encuentro digital BBVA-Salud financiera, organizado por la entidad bancaria, en el que se abordarán cuestiones de interés sobre la administración de la economía doméstica de manera integral

El encuentro tendrá lugar el próximo jueves, 27 de mayo, y será moderado por la directora de LevanteTV, Silvia Tomás. Contará con la presencia de múltiples expertos en este ámbito. En primer lugar, Alberto Guillén, responsable de Productos Digitales de BBVA en España, y, asimismo, asistirán Fernando Castelló, profesor de ESIC, e Isabel Giménez Zuriaga, directora General Fundación Estudios Bursátiles y Financieros

El encuentro también contará con la presencia de Carlos Aguado, uno de los ganadores del Hackaton Beyond Barries BBVA y ESIC, quien aportará una interesante visión de cómo los jóvenes afrontan la gestión de la salud financiera.

Impacto de la pandemia

La pandemia de la covid-19 ha provocado un impacto económico a nivel mundial. Los bolsillos de la inmensa mayoría de los ciudadanos han sufrido las consecuencias de la crisis sanitaria y sus problemas derivados. 

La gestión de la economía particular en tiempos de coronavirus se ha convertido en un verdadero reto y ahorrar parece una misión imposible en un momento de tanta complejidad

Es por ello que, especialmente ahora, resulta de vital importancia cuidar al máximo nuestra salud financiera. Esta terminología se refiere a la gestión económica de cada persona para que los ingresos sean capaces de cubrir los diferentes gastos e inversiones y, además, poder afrontar posibles imprevistos. El equilibrio entre gastos e inversiones es, por tanto, primordial, al igual que una buena toma de decisiones respecto al uso de los recursos financieros personales. 

Planificación

Pese a que suele haber un número de gastos fijos, otros se pueden reducir. De igual modo, hay que destacar la planificación financiera a largo plazo; es decir, ser conscientes de todos los recursos disponibles y qué posibilidades ofrecen los mismos para el futuro.  

Un método de gestión financiera muy extendido es el conocido como la regla del "50/30/20". Se trata de una herramienta que permite vertebrar ingresos y gastos. Este sistema, creado por la profesora de Harvard Elizabeth Warren, se basa en la división de los ingresos en tres tipos de gastos diferente. La mitad de los ingresos, lo que significa el 50% de ellos, ha de estar destinado a cubrir necesidades básicas. Por otro lado, un 30% de los gastos debe ir a parar a aquello útil o atractivo, pero no imprescindible y el 20% de los ingresos restantes deben ahorrarse. 

Este control de la economía garantiza un buen manejo de los ingresos y, además, permite a la larga crear un colchón para sufragar gastos repentinos o imprevistos.

Sin embargo, no siempre se puede aplicar este modelo de ahorro, pues cada persona cuenta con una situación distinta y en muchos casos el nivel de ingresos se destina en porcentajes mucho mayores a cubrir las necesidades que resultan básicas. Por ello, tanto el ahorro como el gasto económico en aspectos no imprescindibles resulta casi imposible. 

Así pues, BBVA ofrece una aplicación que permite administrar la economía doméstica de manera integral. Se trata de la primera entidad en España que ofrece información sobre patrimonio neto en una aplicación. 

UNA 'APP' INTEGRAL: LA APLICACIÓN BBVA OPTIMIZA GESTIONES

Las nuevas tecnologías han adquirido un peso cada vez mayor, especialmente a raíz de la situación de pandemia, donde una cantidad inmensa de las gestiones se ha realizado de manera virtual. En este contexto, BBVA ha querido impulsar los servicios de salud financiera que ya venía ofreciendo a sus clientes para ofrecer una experiencia más completa, personalizada e intuitiva. Aporta un balance de ingresos y gastos de cada individuo, así como un análisis de los gastos más recurrentes. De igual modo, avisa al cliente de los futuros cargos en su cuenta bancaria y le ofrece propuestas que podrían ayudarle a mejorar su salud financiera. Ofrece una doble visión. Por un lado, de corto plazo, que facilite al usuario la planificación diaria. Por otro, una de medio y largo plazo, que le permita afrontar el futuro de manera óptima.