El expediente de regulación de empleo (ere) de Ibercaja ya se ha empezado a aplicar. En el mes de abril se produjeron los primeros despidos, cuando se hicieron efectivas 37 salidas voluntarias, y el próximo 31 de mayo se materializarán otras 88. También se ha registrado cuatro desvinculaciones de trabajadores a quienes se les ha cerrado la oficina y no han aceptado el destino propuesto. De esta manera, en estos dos últimos meses se habrá ejecutado una sexta parte (129) de las 750 bajas para toda España que contempla el ajuste laboral, pactado entre la entidad aragonesa y la mayoría sindical a finales del pasado enero. El resto de afectados se irá sucesivamente hasta terminar el proceso en junio de 2022, según los datos facilitados por CCOO.

La gran mayoría de las extinciones de empleo se llevarán a cabo a través de bajas por edad –conocidas como prejubilaciones– de carácter voluntario, al igual que ha ocurrido en las anteriores reestructuraciones. De hecho, el número de trabajadores que se apuntó al ere superó al de plazas disponibles. En concreto, se presentaron 809 empleados mayores de 55 años, 59 más de los previstos en el recorte de personal. Esto ha obligado a la entidad a aplicar criterios de preferencia para la elección del personal que se prejubilará siguiendo las condiciones pactadas por la parte social. 

Tras este cribado, la lista de bajas asignadas ha ascendido a 712. Las 38 vacantes que restan se han reservado para los trabajadores afectados por cierres de oficinas que no acepten el traslado ofrecido o para los que no se consiga encontrar uno alternativo. De este tipo de desvinculaciones forzosas ya se han ejecutado cuatro y una persona se ha acogido a la excedencia especial acordada en el ere. 

Una vez finalice la clausura de las sucursales –los sindicatos aún no conocen la fecha concreta–, las plazas no utilizadas de esas 38 se asignarán a alguno de los empleados que se apuntaron voluntariamente.

Proceso de cierres

La mayor parte del recorte de plantilla se va a producir en Aragón, el territorio de origen del banco y su principal mercado. De los 712 bajas voluntarias ya aceptadas, en torno a 370 corresponden a esta comunidad autónoma. De ellas, 122 pertenecen a servicios centrales y en torno a 250 a la red de oficinas bancarias, según la información aportada por CCOO.

Por el momento, Ibercaja ha bajado la persiana a 73 oficinas, es decir, algo más de un tercio (el 37%) de las 199 sucursales que puede clausurar como máximo según el acuerdo el ere.

Desde CCOO, principal fuerza sindical en la entidad, hacen una valoración «positiva» de la aplicación del expediente, aunque lamentan que "se han producido algunos desajustes, en los que nuestra intervención ha sido clave para resolver, especialmente en materia de información y comunicación". "No es justificable, pero sí entendible, dado que es el proceso más amplio y complejo que ha ejecutado Ibercaja en toda su historia", precisaron fuentes de la central, que se comprometieron a seguir «trabajando y velando» para que no se produzcan "injusticias o agravios" y, de producirse, «que se resuelvan razonablemente".

El acuerdo del ere fue suscrito por CCOO, Apeca, ACI y Asipa, que suman casi el 79% de la representación de la plantilla, mientras que UGT se desmarcó del pacto.

Continúa sin avances la negociación de los despidos de CaixaBank

La negociación del ere de CaixaBank ha entrado en punto muerto. El recorte de plantilla plantea el despido de casi 8.000 trabajadores en toda España, de los que 53 corresponderían a Aragón (43 en Zaragoza, 8 en Huesca y dos en Teruel). La entidad y los sindicatos mantuvieron ayer una nueva reunión que acabó sin acercamiento entras las partes, que sí acordaron intensificar el calendario de contactos para intentar llegar a un acuerdo que evite los despidos. Las próximas reuniones tendrán lugar los días 1 y 2 de junio. 

La parte social presentó una propuesta de condiciones de salida para los afectados, pero el banco la calificó de «inasumible» y les instó a reconsiderarla para poder acercar posturas antes de que finalice el plazo de negociación.