Moderar las subidas de salarios para evitar un enquistamiento de la inflación. El vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), Luis de Guindos, y el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, han insistido en evitar subidas salariales ligadas a un incremento del nivel general de precios que ambos defienden como transitorio. En sendas intervenciones en la inauguración de la 26 Trobada d'Economia a S'Agaró, loss dos gestores de la política económica han alertado sobre los riesgos de entrar en una espiral precios-salarios.

Guindos, que ha admitido que la economía ha entrado en una etapa de recuperaciñón pero con un "elevadísimo" nivel de incertidumbre, ha atribuido la desaceleración del crecimiento a los cuellos de botella y los costes energéticos. El vicepresidente del BCE ha admitido la aceleración de la inflación y otro elemento, como el alza de los costes de transporte y fletes, e están prolongando más de lo previsto, al igual que el coste de la energía.

El riesgo es que todo ello dure más de lo estimado y que se supere el objetivo de precios del 2% y que eso empiece a afectar a efectos de segunda ronda. Entonces, sería más duradera, ha alertado. Es por ello que es importante, ha enfatizado, que no haya efectos de segunda ronda (trasladar las subidas de costes a productos y rentas) y ha pedido "no cometer errores", en referencia implícita a las subidas salariales.

Hace unos días ya reclamó que las subidas salariales se ligaran a la inflación subyacente, la que excluye los productos energéticos y los alimentos no elaborados, que son los más volátiles, una medida acogida con satisfacción por algunas patronales. Esta variable se situó en octubre en el 1,4%, frente al 5,4% de la tasa general. El vicepresidente del BCE ha insistido en que la inflación es un fenómeno transitorio y en que el BCE mantendrá el apoyo al crecimiento.

En otra de las sesiones, el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, que ha participado en un debate con el presidente de CaixaBank, José Ignacio Goirigolzarri, ha pedido también evitar entrar en una espiral precios-salarios que enquista el alza del nivel general de los precios. "Que (la subida de la inflación) se convierta solo en temporal depende mucho de la actitud de loa agentes sociales", ha afirmado. 

Riesgos con la vivienda y la valoración de activos

El vicepresidente del BCE ha asegurado que, como consecuencia de la pandemia sigue habiendo "un elevadísimo nivel de incertidumbre". Ha afirmado que la estabilidad financiera en Europa ha mejorado. "No se ha producido la oleada de insolvencias que habíamos previsto," ha explicado. Giorigolzarri ha aportado datos en la misma línea. En todo caso, Guindos ha afirmado que a medio plazo, los riesgos aumentan por la evolución del mercado de la vivienda, el endeudamiento tanto público como privado, las valoraciones de los activos financieros muy elevadas y una acumulación en los fondos de inversión de riesgos muy importantes.

Durante su intervención ha destacado que la economía "se ha ido adaptando a los efectos de la pandemia" y ha subrayado los efectos producidos por la vacunación. Como consecuencia de ello, a su juicio los impactos sobre la economía serán "más limitados" de lo que se podría prever en una jornada en la que las bolsas han vivido un día sacudidas por la variante sudafricana del virus y el despegue de la pandemia en diversos países europeos.

Por su parte, en el mismo foro, el presidente de la Cámara de España, José Luis Bonet, ha recordado que la recuperación "ya está aquí", pero "no completa" y tampoco está consolidada. Ha reclamado a los políticos que sean prudentes con las empresas, afectadas por la escasez de suministros o la inflación.

Esta vez, a diferencia de 2008, "Europa lo ha hecho bien", ha asegurado. La propia Cámara ha rebajado al 4,7% el crecimiento previsto para año y al 5,5% el que viene. Y ha emplazado a "ir con cuidado con las políticas públicas, que pueden gripar los motores", que son las empresas. Bonet considera los fondos europeos, de los que a España le corresponden 140.000 millones de euros hasta 2026, "mano de santo" y ha defendido el plan de recuperación español.

El presidente del organismo cameral ha recordado que los fondos tienen que llegar a las pymes, al igual que ha reclamado el presidente de Pimec, Antoni Cañete, en una debate en una sesión anterior. En este sentido ha recordado la importancia de las oficinas de Acelera pymes, a través de las que se gestionará el bono de digitalización al que se destinarán 3.000 millones hasta 2023 para pymes y autónomos.