Esta semana se ha hecho pública la creación de la Cátedra UBE de Plásticos Sostenibles de la Universitat Jaume I, que nace con el propósito de potenciar la investigación y la divulgación en el campo de la sostenibilidad de los materiales plásticos.

El director de I+D de UBE Corporation Europe, Raül Sangrós, relata que «la relación entre UBE y la UJI es intensa, como les corresponde a dos entidades que encuentran un beneficio mutuo en la colaboración». «La aportación de talento y conocimiento desde la UJI se complementa con las opciones laborales y formativas que aporta UBE», afirma, al tiempo que manifiesta que «la nueva Cátedra es una herramienta más para canalizar ese flujo en ambas direcciones».

Sangrós detalla que la Cátedra «promoverá acciones formativas y de divulgación de conocimiento, además de aportar una visión alternativa al papel del plástico en nuestra sociedad, ya que nos va a servir para poder comunicar, con una aproximación científica e integradora, el beneficio que aportan los plásticos».

En continua evolución

El director de I+D en UBE Corporation Europe, con sede en Castelló, argumenta que «la característica que mejor define a la Cátedra es su aspecto investigador, ya que se promoverán proyectos relacionados con los retos que nos presentan el uso de los plásticos». Y recuerda que «se han desarrollado funcionalidades y aplicaciones que resultaban inalcanzables hace años, como la reducción del peso en los automóviles y en la construcción de grandes estructuras o la mejora en la protección de los alimentos y de todo tipo de material médico».

La Cátedra impulsará proyectos dirigidos a compaginar la funcionalidad de los materiales plásticos con la sostenibilidad para gran número de industrias productivas.

Sangrós anticipa que «esos grandes avances tecnológicos se mantendrán y el reto es reaprovechar estos materiales tras su uso». «Hay mucha confusión en el modo en que tenemos que recuperar y utilizar de nuevo los plásticos y la investigación debe ir orientada a aportar soluciones objetivas que no renuncien a las ventajas que nos aportan. Nos urge replantear todo lo conseguido para reequilibrar la funcionalidad junto con valores como son el precio social, ambiental y material».

Asimismo expresa que «el plástico tecnológico es un material muy evolucionado y que está presente en casi todo lo que nos rodea y que haya sido producido. Este desarrollo es el resultado de 150 años de prueba y error hasta haber alcanzado los grandes resultados actuales».

Finalmente, valora que la Cátedra «será una herramienta muy útil para mejorar la percepción del plástico como lo que es, un material rentable desde cualquier punto de vista».