La huelga de los tripulantes de cabina de pasajeros (TCP) españoles de Ryanair finaliza este jueves con un total de 319 cancelaciones y alrededor de 3.700 retrasos a lo largo de las doce jornadas de julio, según han informado los sindicatos convocantes.

Además, el responsable de Vuelo de USO-Sector Aéreo, Ernesto Iglesias, ha lamentado que el fin de la convocatoria se salda con 11 tripulantes despedidos como "represalia selectiva a los trabajadores por ejercer su derecho a huelga".

Iglesias también ha asegurado que este jueves ha tenido lugar una reunión entre Ryanair, sindicatos e Inspección de Trabajo en relación a "las prácticas de esquiloraje de la compañía", en la que "el inspector ha reprochado duramente el recurso de la aerolínea" y por la que cree que "será sancionada gravemente".

En concreto, la duodécima jornada de huelga hasta las 19.00 horas de este jueves ha provocado un total de 280 retrasos (126 en operaciones de salidas y 154 en llegadas), pero no ha ocasionado ninguna cancelación.

El aeródromo más afectado es el de Palma de Mallorca, con un total de 72 demoras (32 en salidas y 40 en llegadas). Le siguen el de Barcelona-El Prat, con 15 demoras en salidas y 28 en llegadas, el de Madrid, con 14 en salidas y 19 llegadas, y el de Alicante, con 14 en salidas y 12 en llegadas. El resto de aeropuertos también ha registrado demoras en sus operaciones.

Este miércoles, USO y Sitcpla, sindicatos que representan a los tripulantes de cabina de Ryanair, convocaron una nueva huelga en la aerolínea desde el próximo 8 de agosto y hasta el 7 de enero de 2023, ambos incluidos.

La nueva huelga consta de jornadas de paros de 24 horas, de lunes a jueves, semanalmente. Los sindicatos señalan que Ryanair "no ha mostrado el más mínimo intento de acercamiento" con ellos, sino que ha manifestado públicamente su negativa a entablar cualquier diálogo con los representantes elegidos por sus tripulantes, según han indicado en una nota de prensa.

Por ello, se han visto "obligados" a continuar con la huelga y convocar nuevas jornadas. Esta nueva convocatoria de huelga en Ryanair responde a las reivindicaciones de los trabajadores sobre la aplicación de los mínimos estatutarios de la legislación española en materia laboral y sindical a todos los tripulantes de cabina que prestan sus servicios en los aviones de Ryanair y en las diez bases españolas.

Además, reclaman la readmisión inmediata de los once trabajadores despedidos durante las anteriores convocatorias de los meses de junio y julio por secundar la huelga, considerada un derecho constitucional. Y, en tercer lugar, exigen la paralización y archivo de todos los expedientes sancionadores abiertos a aproximadamente unos 100 trabajadores con motivo de los paros anteriores.