EMPLEO FEMENINO

Máximo histórico de mujeres ocupadas en España: ya son el 47 % del total de afiliados

En diciembre también se registró una caída del paro femenino

Varias trabajadoras envasan uvas en la provincia de Alicante.

Varias trabajadoras envasan uvas en la provincia de Alicante.

Violeta Molina Gallardo

Buenas noticias sobre el empleo femenino: en diciembre, en España se alcanzó el máximo histórico de mujeres afiliadas a la Seguridad Social hasta los 9,556 millones, con lo que constituyen ya el 47 % del total de las personas afiliadas. En el último mes del año 2022 también cayó en más de dos puntos el paro femenino, situándose en cifras que no se veían desde hace 14 años.

Diciembre fue, en general, un buen mes para el mercado laboral español, con el mínimo dato de paro desde hace 15 años y una cifra récord de afiliaciones, según las estadísticas hechas públicas este martes por los ministerios de Empleo y Seguridad Social. Esas buenas cifras generales también fueron favorables para el empleo femenino. Sin embargo, a pesar de que las brechas de género se van acortando poco a poco, no hay que perder de vista el lacerante impacto de la desigualdad en el mercado laboral.

Récord de afiliadas

En diciembre hubo 9.559.179 mujeres afiliadas a la Seguridad Social, el número más elevado de ocupadas desde que se registran los datos de afiliación. Ellas ya son el 47 % del total de personas afiliadas, también el porcentaje más elevado de todos los tiempos.

En el mismo periodo, hubo 10.737.092 hombres ocupados. En total, sumando hombres y mujeres, el mes pasado hubo 12.640 afiliados más que en noviembre y 471.360 más que un año antes.

Además, los datos del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) con respecto a diciembre sitúan a diciembre con la menor tasa de paro desde 2007, con 2.837.653 parados. Si se atiende al paro femenino, descendió un 2,17 % con respecto a noviembre, lo que supuso 37.411 mujeres paradas menos.

El número de mujeres paradas fue de 1.690.148, el menor dato desde hace 14 años. Sin embargo, esta contracción del paro femenino aún es insuficiente para compensar la brecha de género existente: las mujeres aún constituyen el 59,56 % de las personas paradas en este país, frente al 40,44 % que suponen los hombres.

La comparación de diciembre de 2022 con el mismo mes de 2021 revela un descenso del paro mayor para la población masculina (10,48 % menos) que para la femenina (7,34 % menos).

Sin embargo, la comparación con noviembre del 2022 sí arroja un mayor descenso en el paro femenino (37.411 mujeres frente a 6.316 hombres, caídas del 2,17 % y del 0,55 %, respectivamente).

Sucede algo similar en el colectivo de población extranjera: hay más mujeres paradas (220.169 frente a 139.300 hombres) y la variación interanual con respecto a diciembre de 2021 es más favorable para ellos (con una caída del 14,08 % frente a una del 6,02 % en el paro femenino), mientras que la comparación con noviembre es más favorable para las mujeres (1,87 % menos de paradas y un 0,32 % menos parados).

Donde se describe un mejor escenario para ellas que para ellos es en el conjunto de población menor de 25 años: son menos las mujeres paradas (95.049 frente a 100.702 varones jóvenes) y los descensos en el paro femenino son mayores que los registrados en el masculino tanto si se compara diciembre con noviembre (caídas del 6,56 % del femenino y del 5,19 % del masculino) como con el mismo mes de 2021 (caída del 12,44 % entre ellas y del 11,7 % entre ellos).

Estas tendencias se revierten a partir de esa edad, momento en que la maternidad penaliza las opciones y carreras profesionales de las mujeres. En la población de mujeres de más de 25, el número de paradas asciende a 1.595.099 ciudadanas, un dato que contrasta con los 1.046.803 hombres en situación de desempleo.

Desigualdad en los contratos

La desigualdad de género no sólo se mide en términos de personas ocupadas, también debe analizarse el tipo de contrato que se hace y las posibles diferencias por sexos.

Del total de contratos de diciembre, 1.189.917, 628.216 fueron para hombres y 561.701, para mujeres. El Ministerio de Empleo precisa que 107.292 de estos contratos fueron a tiempo parcial y 177.877 fijos discontinuos, si bien no desagrega estos datos por sexos.

Si se sabe que el pasado mes de diciembre volvieron a ser más los hombres contratados de forma indefinida (269.433 frente a194.719 mujeres). A ellos les hicieron más contratos indefinidos iniciales (241.377 a varones y 171.522 a mujeres) y también los convirtieron más en indefinidos desde otro tipo de contratos ( 28.056 frente a 23.197 mujeres).

Donde vuelven a llevar la delantera, por desgracia, las mujeres, es en la contratación temporal, otro claro indicador de la desigualdad. De los 725.765 contratos temporales de diciembre, 366.982 fueron para las mujeres y los 358.783 restantes, para los hombres. Al ver la variación anual de contratos temporales, se aprecia una contracción mucho mayor (del 56,81 %) para los varones que para ellas (45,80 %), al igual que al comparar diciembre con noviembre (caídas del 11,29 y del 9,3 %, respectivamente).

Y la empresa recurre mucho más a las mujeres para contratos de sustitución, casi el doble de las veces (28.493 hombres y 57.012 mujeres).

El camino hacia la igualdad laboral es aún largo.