Para la mayoría de los españoles las vacaciones están a punto de llegar a su fin. Toca regresar a la rutina, hacer frente a los desafíos del día a día y dejar atrás la desconexión laboral. Y con la vuelta encima de la mesa surge un término que no para de repetirse año tras año en estas fechas: el síndrome postvacacional.

"Se puede definir como el estado que se produce en el trabajador al fracasar el proceso de adaptación entre un periodo de vacaciones y de ocio con la vuelta a la vida activa, produciendo molestias que nos hacen responder a nuestras actividades rutinarias con un menor rendimiento", describe Eduardo Martín, CEO de Alares.

Cabe destacar que la OMS no reconoce este síndrome como una enfermedad, ya que lo cataloga como un fenómeno psicoemocional que desaparece en los primeros 15 días desde que el trabajador vuelve a su actividad laboral. No obstante, Martín reconoce que durante esas dos semanas el síndrome puede generar en el trabajador: falta de concentración, dificultad a la hora de priorizar tareas y baja productividad. Según cifras de Bizneo HR, en 2020, dos de cada cinco empleados padecieron entre síndrome.

Factor extra: la vuelta a las oficinas

Todo esto no es nuevo, el síndrome postvacacional es un fenómeno que se repite todos los años en parte de los trabajadores. Sin embargo, este septiembre hay que sumarle un añadido: la posible vuelta a las oficinas. Debido al buen funcionamiento de la vacunación y al descenso de la quinta ola de la pandemia son muchas las empresas que han decidido que sus trabajadores regresen al trabajo presencial. Un hecho que no puede tener más divididos a los empleados españoles, ya que según Bizneo HR, un 51% de los profesionales está de acuerdo con la vuelta al trabajo presencial y un 58% tiene ganas de reunirse con los compañeros; sin embargo, un 71% reconoce estar preocupado por los riesgos de la COVID-19. Debido a esto último, desde Sodexo advierten a las empresas que es vital que garanticen la seguridad de sus trabajadores, así como consensuar la vuelta a las oficinas, si quieren mantener la productividad de sus empleados.

Para Martín la vuelta a las oficinas puede tener una influencia positiva siempre y cuando se gestione bien. "Conociendo las necesidades individuales y gestionando la diversidad de las plantillas, con flexibilidad y empatía, tanto para la vuelta a la oficina, la continuación del teletrabajo o la implantación de un modelo mixto". asegura.

En este sentido, Agustín López, instructor y experto en liderazgo de Udemy, da una serie de consejos a los trabajadores para que la vuelta a la oficina, en particular, y la vuelta al trabajo, en general, sea lo más llevadera posible:

Cuidar las relaciones interpersonales

Mantener una relación viva con el resto de compañeros hará que el trabajo se realice de una forma fluida y natural. "Involucrarles en las tareas diarias, aprender a escucharles y mantener su espíritu activo, entre otros aspectos, son también objetivos primordiales a la hora de volver a retomar la rutina laboral y cuidar las relaciones entre líderes y trabajadores, haciendo que la vuelta sea mucho más fácil y llevadera", asegura López.

No 'forzar' la vuelta

Dejar algún día de descanso entre el fin de las vacaciones y el comienzo de la rutina ayuda a tomar conciencia de ello y prepararse para retomar el trabajo. Es decir, si nuestra reincorporación cae en lunes, intentar que la vuelta de vacaciones sea un viernes, por ejemplo. 

Establecer objetivos y nuevos retos tras la vuelta

Antes de la reincorporación, es fundamental recordar cuáles son nuestros propósitos en el trabajo y establecer nuevos retos. Es decir, llevar a cabo una actividad de reflexión personal en la que tener en cuenta y reconectar con aquello que te motiva de tu trabajo, qué es lo que te hace crecer en la empresa, a quién ayudas con tus tareas diarias, etc.

Generar momentos de 'no distracción'

Muy importantes para favorecer una atención plena en el trabajo que nos encontremos realizando. Por ejemplo, evitando el uso del teléfono durante, al menos, periodos de 30 minutos, reservando una habitación de la casa o un espacio concreto y aislado de la oficina para realizar un trabajo concreto, etc.