La educación importa para acercarnos a la felicidad fue el segundo capítulo del evento La educación importa, que se celebra cada lunes y jueves hasta el próximo 10 de junio, y que contó con la colaboración de Fundación Pons y Penguin Random House, bajo el sello Beascoa.

En él, se dieron claves para enseñar a nuestros hijos e hijas a ser felices. ¿Enseñar? Sí, de hecho, diferentes expertos defendieron la tesis de que a ser feliz se aprende, y que somos las madres y padres los encargados de enseñar a nuestros hijos a serlo. La clave está en la inteligencia emocional. Una inteligencia que no es innata (nadie nace con ella), sino que se va adquiriendo. Solo si dotamos a nuestros hijos de las habilidades que poseen las personas inteligentes emocionalmente: resiliencia, empatía, gratitud, tolerancia a la frustración… podremos ayudarles a ser individuos sanos emocionalmente y, por tanto, más felices.

Las claves para conseguirlo las dieron los diferentes expertos que participaron en el programa:

1. No podemos pretender que nuestros hijos estén contentos siempre

Yo no quiero que mis hijas sean felices. Yo quiero que mis hijas vivan todas las plataformas emocionales y escojan la emoción adecuada, en el momento adecuado y con la intensidad oportuna. Yo quiero que mis hijas estén tristes cuando pierden a un ser querido porque, de no hacerlo, serían psicópatas. Yo quiero que mis hijas sientan enfado cuando alguien las pise porque, de no hacerlo, serán mujeres maltratadas. Cuidado con pretender la felicidad de nuestros hijos a toda costa, todo el tiempo”, Mar Romera (Pedagoga).

2. La autoestima es una clave fundamental en la felicidad

Solo si nuestros hijos se sienten bien con quiénes son, aceptando que muchas de las circunstancias que los rodean no las pueden cambiar, teniendo muy claro que su felicidad no depende de otros (nadie se la puede quitar ni nadie se la puede dar), sino que es una actitud ante la vida, podrán ser felices”, Begoña Ibarrola (Psicóloga).

 3. Hay que enseñar a nuestros hijos a hacer un uso adecuado de las redes sociales, a construir de su ‘yo virtual’

Si la diferencia entre lo que es tu hijo y lo que vende que es en redes sociales es muy grande, el resultado es la frustración. Y la frustración tiene dos amigas: la depresión y la dependencia.”, Marc Masip, (psicólogo, experto en adicciones a las redes sociales).

4. Los padres no podemos dimitir de nuestra función como padres

No tenemos que preocuparnos tanto de si la publicidad o las redes sociales generan frustración en nuestros hijos por esa falsa idea de felicidad que venden. Frente a eso, los padres tenemos que hacer de padres, tratando de orientar y ser el filtro que nuestros hijos necesitan”, Toni Segarra (Publicista).

5. Los cuentos son una potente herramienta educativa

Hay conceptos que son intangibles, que no se pueden ver y, por tanto, cuesta mucho hacérselos entender a nuestros hijos, como pueden ser el valor de la gratitud, la tolerancia a la frustración, la empatía, la positividad…. Pero, gracias a los cuentos, podemos explicar estos conceptos a nuestros hijos a través de historias que les ocurren a sus personajes”, Anna Morató (escritora del cuento ‘De mayor quiero ser...feliz’, editado por Penguin Random House, bajo el sello Beascoa).

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La educación importa para conseguir la verdadera igualdad de género

Fecha: 17 de mayo

Hora: 22.00 horas

Inscripción gratuita

www.laeducacionimporta.com