Se acaban las vacaciones de Navidad y toca volver al cole. Tras una época en la que han tenido más libertad, flexibilidad, regalos, ilusión, y todo lo que experimentan los niños y niñas durante la época navideña, a muchos se les hace cuesta arriba la vuelta a la rutina (y a muchos adultos también, por supuesto).

Por lo tanto, si queremos ayudar a nuestros hijos a retomar sus rutinas de la forma más adaptativa posible, hay algunas claves que no podemos perder de vista.

Abrir paso a la rutina antes de la vuelta al cole

Una de las estrategias que podemos llevar a cabo para facilitar la vuelta a la rutina de los niños es empezar a implementar de forma progresiva pequeñas acciones, por ejemplo, ajustar la hora de acostarse, quitar la siesta (si no podrá hacerla en el cole), empezar a hablar sobre la vuelta a la rutina…

"Estar disponibles y cercanos creará un clima donde será más fácil que nos cuenten si algo les preocupa"

Úrsula Perona - Psicóloga

La psicóloga Úrsula Perona hace hincapié en que “hablemos mucho con ellos para detectar con qué ánimo afrontan esta nueva etapa, y si hay algo en lo que necesitan apoyo (miedo al rechazo, a separarse de nosotros…). Como siempre, estar disponibles y cercanos creará un clima donde será más fácil que nos cuenten si algo les preocupa. No olvidemos que los niños, por lo general, cuentan poco, pero tienen un mundo emocional complejo y rico”.

Motivación para volver a la rutina

Es muy importante que motivemos a nuestros hijos para que empiecen enero con buen pie. Y para ello debemos evitar reproches: “A ver si este año estudias más”, “espero verte más centrado este curso”… porque conseguiremos justo lo contrario.

Es fundamental motivar a nuestros hijos para la vuelta a la rutina Pexels

“Es más conveniente, y nuestro hijo lo agradecerá, que le devolvamos una visión positiva de él mismo y de lo que sabemos que es capaz de hacer: “sé que este año vas a estudiar mucho”, “estoy convencida de que disfrutarás más el estudio”, “te veo mucho más responsable”. Si tenemos un adolescente, debemos entender que estará perdido en esta etapa compleja y desbordado por sus emociones, por lo que necesitará apoyo incondicional y que le veamos con todo su potencial: devuélvele esa mirada. Que vea a través de tus ojos la persona que puede llegar a ser”, señala Úrsula Perona.

Implementar rutinas mediante el juego

Como ya sabéis, el juego es una de las mejores herramientas que podemos usar como aliadas en la educación de nuestros hijos, también para implementar rutinas y normas.

Por ejemplo, la psicóloga Patricia Ramírez nos contaba que jugar desde primera hora puede ayudar a que los niños hagan sus rutinas: “Por la mañana cuando me levanto y preparo el desayuno ya empiezo jugando con mis hijos. Mi hijo es un poco perezoso. Entonces pongo mi cronómetro y le digo: Pablo, te estoy cronometrando el tiempo que tardas en salir de la cama. Y el tiempo que tardas en vestirte, y el tiempo que tardas en asearte y bajar a desayunar. Y cuando baja le doy los tiempos y hago como que lo anoto en una libreta para compararlo con otros días”. Esta estrategia de educar jugando permite que los niños hagan sus rutinas a tiempo, que lo vean como algo divertido y no como un martirio, además de que ayuda a fomentar un clima familiar distendido y amigable desde primera hora de la mañana.

El ejemplo que damos las madres y los padres

Como en todos los aspectos que rodean la educación y crianza de nuestros hijos, el ejemplo que demos nosotros es fundamental. No podemos olvidarnos de que los niños y niñas no aprenden de las órdenes que les damos, ni de lo que les decimos que tienen que hacer, sino que nos aprenden a nosotros.

Por eso, es importante que nos hagamos algunas preguntas: ¿Cómo nos comportamos delante de nuestros hijos? ¿Nos vamos a dormir cada día a una hora? ¿A veces desayunamos y otros días no? Si queremos que nuestros hijos cumplan las rutinas que les decimos, también nosotros tenemos que cumplir con nuestra parte y no saltarnos aquello que obligamos a nuestros hijos e hijas.

4 claves para facilitar la vuelta a la rutina de los niños:

La psicóloga Patricia Ramírez también señala otras claves que pueden ayudar a nuestros hijos a volver a la rutina tras la Navidad:

  1. Es importante que su cuarto esté ordenado. Igual puedes cambiar algo de la decoración, poner algún póster nuevo que ellos elijan, cambiar la mesa de ubicación, tirar el material que no sirva del año pasado. Que apetezca sentarse a hacer los deberes.
  2. Cuida tus expresiones. No verbalices que es un rollo volver al trabajo porque ellos copiarán esos comentarios y los utilizarán en contra del cole.
  3. Hazle saber que cuenta con tu apoyo, que va a aprender cosas nuevas y que va creciendo, no solo en altura, sino como persona.
  4. Los primeros días presta especial atención y fomenta la comunicación sobre su profesor para saber qué impresión tiene, de los compañeros, de la materia, de los deberes o si le preocupa algo. Y, sobre todo, deja que hable de lo que a él le gusta. Si empiezas a interrogarlo con lo que come, cuánto come, si se porta bien… no le apetecerá hablar contigo del colegio.