El Año de la fe, convocado por el papa emérito Benedicto XVI e inaugurado por él mismo el 11 de octubre del pasado año, será clausurado por su sucesor, el papa Francisco, el próximo domingo, 24 de noviembre, festividad de Jesucristo, Rey del Universo.En nuestra Diócesis celebraremos la clausura la víspera, la mañana del sábado, con una solemne celebración Eucarística en la Santa Iglesia Concatedral de la Diócesis en Castellón; estará precedida con concentraciones y celebraciones en cuatro iglesias cercanas, desde las que peregrinaremos en procesión a la Concatedral haciendo profesión pública de nuestra fe. Os invito de corazón a todos a esta celebración diocesana para mostrar con humildad la belleza de nuestra fe y compartir la alegría de creer.

Con estos actos, deseamos, ante todo, dar sentidas gracias a Dios por los abundantes dones que de él hemos recibido durante este tiempo de verdadera gracia: ha sido un año en que, con la ayuda de Dios, hemos abierto un poco más nuestro corazón a Dios, y se ha avivado y fortalecido nuestra fe personal y comunitaria; un año en que hemos profesado repetidamente nuestra fe, recitando más conscientemente el Credo.

Un tiempo en que muchos hemos podido profundizar en el conocimiento de los contenidos fundamentales de nuestra fe, en que hemos celebrado en las comunidades y en la Diócesis el tesoro inmenso de la fe recibida; un año en que, con la ayuda de la gracia, hemos intentado vivir más fiel y radicalmente la fe y vivirla en la caridad y en la existencia diaria.

Concluido el Año de la fe permanece la necesidad de mantenerla viva, de profesarla y conocerla, de celebrarla y vivirla para ser testigos de Jesucristo y de su Evangelio. Jesús nos llama a ser sus discípulos y misioneros. H

*Obispo de Segorbe-Castellón