Al frente de la Unió de Llauradors i Ramaders desde hace ya más de siete años, este traiguerino tiene raíces profundas como las de un olivo en la agricultura provincial. Preocupado siempre por las repercusiones para los productores primarios, analiza para Mediterráneo las diferentes ramas del sector en la provincia.

-Está empezando la campaña citrícola y parece que, por fin, tiene buenas perspectivas para los agricultores, al menos en lo que se refiere al precio de la fruta…

--Habrá que esperar al final de la campaña para valorarlo. Es cierto que los precios son mejores, pero también lo es que tenemos bastante menos cosecha que la campaña pasada, por ello ya veremos cuáles son los ingresos de los agricultores y si esas cotizaciones más altas compensan la falta de producción. La campaña varietal más importante de Castellón son las clemenules y a partir de mediados de este mes empieza el grueso de su comercialización y es aquí donde veremos al detalle cómo será esta temporada para los citricultores.

-¿La falta de fruta va a conseguir erradicar por fin la venta a pérdidas que tanto han denunciado?

--Esperemos que no se den casos de venta a pérdidas como ha ocurrido en anteriores campañas. Al menos se dan todos los condicionantes para que las grandes cadenas de distribución no lo hagan. Desde la Unió estaremos vigilantes a diario para denunciar tanto una posible venta a pérdidas como cualquier cuestión que altere el correcto desarrollo de la campaña. Ahora bien, desde las instituciones europeas no ayudan mucho, ya que instan al Gobierno a cambiar la normativa que frena la venta a pérdidas.

-¿En qué situación está el cultivo de naranja en Castellón? Lo digo porque siguen abandonándose huertos y sustituyéndose la naranja por otros cultivos...

--Las últimas campañas no han sido buenas, más bien negativas, y los agricultores pueden soportar pérdidas en alguna, pero tantas seguidas ya son difíciles de aguantar. Resulta comprensible por tanto que se hayan abandonado campos de cítricos ante la falta de rentabilidad, sobre todo de la citricultura menos profesionalizada. Me gustaría aconsejar a los agricultores que se informen antes arriesgarse a cambiar de cultivo, porque igual es como ir de Guatemala a guatepeor.

-En su opinión, ¿es necesario que se retome un foro donde dialogar con comercios y cooperativas? En su día se habló de resucitar Intercitrus, pero ahora se dice que se intenta llevar a Sevilla.

--Es un poco sorprendente que aquellas organizaciones, sobre todo las agrarias, que hundieron la interprofesional ahora quieran reflotarla. Lo que está claro es que si la Unió de Llauradors no puede estar porque no le dejan a pesar de su representatividad e implantación cuando otras no tienen ni citricultores afiliados, exigiremos que las posibles extensiones de norma se apliquen solo a los cítricos andaluces y que la Administración valenciana no subvencione esta interprofesional, a pesar de que lo importante no es dónde esté la sede, sino que teníamos una Intercitrus que han dejado morir como algunos lo están haciendo con los productores. Nuestra organización estatal, Unión de Uniones, ha recurrido ante Bruselas el funcionamiento de las actuales interprofesionales porque no están constituidas conforme a la ley europea en vigor y la representatividad se la adjudican sus integrantes sin ningún proceso participativo.

-La naranja no es el único fruto que se está recolectando y la aceituna está en pleno proceso. ¿Qué campaña esperan?

--En nuestra comunidad se espera un ligero aumento de producción respecto a la campaña pasada, una de las peores, pero aún así será inferior a la media de los últimos años. En Jaén, la mayor productora y que marca el precio, se espera, como consecuencia de la sequía, muy poca producción. Si llegan a 400.000 toneladas bastante harán. En Córdoba la producción será parecida a la de la campaña pasada, en Granada bajará un poco y en Sevilla se espera un ligero aumento.

-Este cultivo se ha visto muy afectado por la sequía, que se está convirtiendo en un problema endémico...

--En la provincia de Castellón no hay sequía hidrológica porque las reservas hídricas se encuentran bastante mejor que en Valencia y sobre todo Alicante, pero sí tenemos sequía en el campo. Las cosechas se resienten en su producción por la falta de agua como es el caso de los cereales…. También afecta, y mucho, a la ganadería extensiva que debe hacer frente a la compra de piensos ante la escasez de pastos naturales, lo que encarece los costos.

-En cuanto a la almendra, el otro gran cultivo de la provincia. ¿Cómo se ha cerrado el año?

--Según las últimas estimaciones del sector, la producción de almendra en la Comunitat ha sido de cerca de 6 millones de toneladas de pepita, lo que supone un aumento del 42% respecto de la campaña pasada y de un 32% respecto de la media de las últimas cinco. En Castellón la producción ha sido similar a alcanzada la campaña pasada. No obstante, respecto de la almendra cabe destacar dos problemas, por un lado la amenaza de la Xylella fastidiosa, que ya está afectado a almendros de las comarcas del norte de Alicante y por otro a la bajada importante de precios que se han desplomado incluso a mitad respecto de la campaña pasada.

-Hace un tiempo se hablaba del ‘boom’ de este cultivo, con variedades más productivas y escasez de plantones. ¿En qué ha quedado y ha supuesto esto?

--El aumento de producción de esta campaña no se debe al aumento del rendimiento si no a la entrada en producción de las nuevas plantaciones. A lo largo de las próximas campañas asistiremos a un aumento incesante de la producción, sobre todo en Comunidades como Castilla-La Mancha, Aragón y Andalucía, donde han aumentado de manera considerable las plantaciones sobre todo con variedades más productivas. Supongo que como he dicho antes, la amenaza de la Xylella y el descenso de precios que obedece a unas estrategias comerciales harán que algunos agricultores se piensen más que antes el cambio al cultivo del almendro.

-En cuanto a la ganadería, ¿están cambiando los hábitos en Castellón? Antes era mayoritario el porcino y ahora parece que se impone el aviar. ¿Por qué?

--Castellón continúa liderando el sector ganadero de la Comunitat. El porcino continúa siendo la mayor producción, se está reestructurando, reduciéndose el número de explotaciones, pero aumentando el tamaño y por tanto la producción. Los movimientos de las empresas integradoras también influyen directamente en el sector ganadero integrado.

-Desde el Consell se está tratando de impulsar la agricultura y ganadería ecológica, pero en Castellón no arraiga. ¿Por qué?

--La agricultura y la ganadería ecológica no se implanta de la noche a la mañana. Se necesitan muchos incentivos y apoyos para que el agricultor dé el paso de un cambio de modelo productivo como el de pasar del convencional al ecológico. La Conselleria de Agricultura, y la Generalitat, apuestan por incentivar ese cambio y a la larga pienso que se notará en las cifras de aumento de la agricultura ecológica en toda la Comunitat y también en Castellón. Pero lo importante no es el sistema productivo, lo importante es que sea rentable.