La dirección del PSE eludió ayer aclarar si pactará con el PP tras las elecciones municipales, pero sí adelantó que no sellará acuerdo alguno con el nacionalismo si mantiene el plan soberanista de Juan José Ibarretxe.

En una respuesta formal al emplazamiento que el domingo le lanzó el lendakari para que defina su política de alianzas, la ejecutiva socialista precisó que no hablará ahora de pactos "sino de programas" y que le correponde a Ibarretxe aclarar si mantiene un plan que "desintegra" el País Vasco. La declaración difundida por el PSE ratifica la decisión de no implicarse en ningún consenso con el PNV si el punto de partida es la propuesta de Ibarretxe.

Precisamente, el lendakari se felicitó ayer por la implicación social en el debate sobre su proyecto soberanista (33.550 familias le han enviado sus preguntas y consideraciones) y reiteró que el próximo setiembre presentará en el Parlamento un "texto articulado" de nuevo Estatuto.

Ibarretxe insistió en su disposición a "negociar" con "todos los partidos" el contenido de su propuesta, pero se mostró esquivo para concretar los pasos que dará si no logra la mayoría parlamentaria precisa para una reforma estatutaria. Dejó abierta tanto la posibilidad de disolver la Cámara y adelantar las elecciones como la de retirar finalmente su propuesta. En todo caso, dijo que su empeño es trabajar por "el consenso" y descartó considerar los resultados de las municipales como termómetro para su plan.