Los candidatos del PNV y EA firmaron ayer en Gernika un "compromiso ético" en defensa de "todos los derechos de todas las personas" por el que exigen a ETA el cese "total y permanente" de su actividad. A la par, reclaman al Gobierno español y a los firmantes del "pacto antiterrorista" que pongan fin a la "estrategia de la confrontación" y den paso a "un nuevo tiempo de diálogo".
El 66 aniversario del bombardeo de Gernika, que se conmemoró el sábado, es la base del manifiesto con el que los integrantes de la coalición nacionalista quieren responder a las críticas reiteradas de la banda terrorista contra el PNV y EA, y a la presión que les dirigen miembros del Gobierno y de la ilegal Batasuna.
El documento reafirma el "compromiso prioritario" de los candidatos de la coalición con el derecho a la vida y expresa su "solidaridad activa" con las víctimas de la violencia, la intolerancia y el terrorismo "en cualquiera de sus manifestaciones".
Los candidatos dejan clara en el texto su disposición a defender la propuesta de Juan José Ibarretxe para un nuevo pacto de libre asociación a España. Anuncian que actuarán para defender los derechos y libertades de todos los ciudadanos, incluidos los presos, y para "garantizar el pluralismo" y el respeto a todos las ideas "expresadas libre y democráticamente".
