Después de modificar más de la mitad del articulado del Estatuto de Andalucía, el acuerdo entre los dos grandes partidos está ya muy cerca. Socialistas y conservadores ultiman ahora un pacto en el difícil apartado de las inversiones, que atenderán al criterio de población, y que se recoge en una disposición final que se votará mañana en la comisión constitucional.

CONSENSO De los 11 títulos que forman el texto estatutario, ha habido consenso en nueve, incluido el que hace referencia al tema de la financiación. El PP asegura que todo el documento, se encuentra ya "descatalanizado" porque no "ordena nada al Estado", sino que solicita que se "tenga en cuenta" el criterio de la población real y efectiva.

Asimismo, los populares destacan que el estatuto contiene referencias expresas a la solidaridad y la nivelación de servicios esenciales. En Izquierda Unida, sin embargo, el acercamiento por parte del PP a las propuestas socialistas se interpreta de forma clara. El coordinador general acusa a los populares de "abrazar" en el Estatuto andaluz lo que rechazaron en Cataluña.

Aunque también ha quedado pendiente la disposición que aborda la cuestión de la deuda histórica, el presidente de los populares andaluces, Javier Arenas, ha afirmado que el verdadero escollo por resolver es el concepto de realidad nacional para definir a la comunidad autónoma en el preámbulo.

EL ÚLTIMO PASO Los negociadores del proyecto de reforma del Estatuto andaluz aseguraron al finalizar la sesión del pasado viernes que ahora "todo queda en manos" del presidente Manuel Chaves y de Arenas.

Ambos líderes tratarán de llegar a consensuar una propuesta --que pasa por definir a la comunidad como nacionalidad y utilizar la expresión de la polémica en un sentido histórico--, de forma que el PP pueda aceptar su constitucionalidad.