La Policía Nacional detuvo ayer en la localidad fronteriza de Portbou (Girona) al presunto etarra Iker Aguirre Bernadal, que al parecer planeaba crear una estructura estable de ETA en la costa mediterránea y pretendía recabar información sobre la Copa del América en Valencia. La detención se produjo a las nueve y media de la mañana en un tren Talgo procedente de Montpellier (Francia) que Aguirre había tomado en Puigcerd y que tenía como destino la estación de Sants de Barcelona.

En el momento de su detención, Aguirre llevaba 3.000 euros en metálico, seis documentos nacionales de identidad falsos y otros documentos que están siendo analizados y que algunas fuentes concretan en manuales para la fabricación de explosivos. Según el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, los expertos policiales sospechan que el detenido, que ayer fue trasladado a Madrid, planeaba crear una estructura estable de ETA en la costa mediterránea.

Por otro lado, la jornada de protesta convocada para ayer en el País Vasco por la izquierda aberzale en contra de la reciente sentencia que declara terroristas a las organizaciones juveniles Jarrai, Haika y Segi se saldó con escasos incidentes y una bajísima participación. La Ertzaintza detuvo en Vitoria a dos personas que se habían encadenado a la verja exterior del Parlamento.