Juan José Ibarretxe no da un paso atrás y está decidido a relanzar el debate soberanista sobre el derecho de autodeterminación, lo que llama "capacidad de decisión", al margen de las actuaciones de la banda terrorista ETA. En su reaparición para iniciar el curso político, confirmó que mantiene su compromiso de "consultar" a los vascos sobre su futuro, aunque evitó aclarar si lo hará en la legislatura que concluye en el año 2009.

El lendakari dejó para el pleno de política general que se celebrará el próximo 27 de septiembre la concreción de las "iniciativas políticas" que permitirán "dar la palabra" a la sociedad vasca, pero avanzó que los atentados no le van a condicionar. "La normalización política ha de hacerse exista o no ETA", sentenció, advirtiendo de que no está dispuesto a dar a la banda terrorista "el timón" de la política.

LA PAZ Y LA PALABRA En un mensaje cargado de voluntarismo y ajeno a los postulados del presidente del PNV, Josu Jon Imaz, que ha desaconsejado hablar sobre la consulta, Ibarretxe recalcó que el futuro de Euskadi no lo van a decidir en Madrid ni el PSOE ni el PP. "Que se les vaya de la cabeza", aseguró el lendakari, antes de señalar que no sabe cuándo, pero que la decisión la tomarán los vascos.

Ibarretxe aprovechó su comparecencia para reprochar a José Luis Rodríguez Zapatero que no haya permitido a los socialistas navarros tomar sus propias decisiones y para minimizar los serios desencuentros que se han sucedido entre los miembros del tripartito. A pesar de que el lendakari reconoció que PNV, EA y EB tienen "sus rifirrafes", enfatizó que los tres partidos darán su apoyo "rotundo" al debate sobre la autodeterminación que acabará "en una consulta democrática", a cuya realización vinculó su futuro. De hecho, el lendakari Ibarretxe añadió que su vida política acabará "cumpliendo" la promesa de dar a los vascos "la paz y la palabra".

ACABAR CON ELLOS Josu Jon Imaz protagonizó un mitin en la localidad guipuzcoana de Zarautz horas después de la intervención del lendakari, pero no realizó ni una alusión a la consulta. Su compañero de tribuna, Joseba Egibar, presidente de la Ejecutiva guipuzcoana, demostró su mayor sintonía con Ibarretxe y defendió que los vascos expresen en las urnas "lo que quieren ser".

Mientras Egibar criticaba el "marcaje" que llevan a cabo los medios de comunicación a su partido y apelaba al "derecho a decidir", Imaz optó por definir los retos sociales del PNV e impulsar la "deslegitimación política y social" de ETA y Batasuna con el fin de "acabar con ellos cuanto antes". Ambos líderes coincidieron, al menos, en la necesidad de recuperar la unidad interna del partido, que admitieron tocada.