El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, ha reconocido hoy que la Ley contra la Violencia de Género no es suficiente para acabar con esta lacra social y ha prometido que, en caso de ganar las elecciones, en la próxima legislatura reforzará la lucha contra este tipo de machismo. En un acto electoral con colectivos de discapacitados, Caldera ha recordado que la ley que combate la violencia machista es un instrumento "necesario" que fue aprobado en el Parlamento por unanimidad.

Sin embargo, "a la vista de la persistencia del azote criminal machista" de los últimos días, "seguramente" no es suficiente para acabar con la violencia de género y, por ello, "estamos dispuestos a profundizar en todas y cada una de las políticas, medidas y compromisos necesarios para perseguir esta terrible lacra que a todos nos avergüenza". Caldera ha avanzado que, en caso de ganar las elecciones, lo primero que hará el próximo Ejecutivo socialista será convocar una Conferencia de Presidentes autonómicos, para abordar este tema de manera monográfica, y desarrollar el Plan Nacional de Sensibilización y Prevención, aprobado por el Gobierno en 2006.

Además, "una de las primeras cosas que haremos será poner en marcha un modelo de campañas de sensibilización permanentes y accesibles, como las de Tráfico, que analicen este fenómeno en todas sus dimensiones y hagan especial hincapié en la gravedad de este problema que es una vulneración de derechos fundamentales". Esas campañas, "de sensibilización y estímulos al compromiso" se centrarán en "el rechazo absoluto al agresor" y en la defensa de los derechos de las mujeres, ha precisado.

Caldera también se ha referido a la ley de dependencia, una norma, ha subrayado, que se debería aplicar por igual en toda España porque es un derecho de los ciudadanos que "no admite juegos políticos ni utilizaciones fraudulentas para hacer daño al adversario político". Ha reconocido que incluso las autonomías gobernadas por el Partido Popular, como Navarra, están aplicando y desarrollando estas ayudas, "todas menos la comunidad de Madrid" que hasta el momento sólo ha reconocido a 1.400 dependientes en toda la comunidad y que, "según los cálculos de Mariano Rajoy se deben estar repartiendo 700 millones de euros".

En cuanto a los discapacitados, ha recordado que para la próxima legislatura el programa socialista prevé mejoras sociales para este colectivo como la creación de 200.000 empleos, el fomento del transporte público gratuito o la creación de un contrato programa que permitirá a las empresas públicas y privadas y al tercer sector colaborar en la puesta en marcha de los servicios de dependencia. En cualquier caso, ha subrayado, "si en el futuro hubiera dificultades, la respuesta socialista nunca pasará por el recorte de los niveles de bienestar social, sino por el diálogo, los acuerdos y la búsqueda conjunta de soluciones".

Por su parte, el presidente del CERMI, Mario García, reclamó al PSOE que garantice la estabilidad financiera de la ONCE -a través de la regulación del juego por internet y de la lucha contra el juego ilegal-, que revise el copago de la dependencia, y que ponga en marcha una protección integral para las víctimas de los accidentes de tráfico, entre otras propuestas.