La de ayer era la primera vez que un secretario general del PSOE clausuraba un congreso del Partido Socialista de Navarra (PSN). Y José Luis Rodríguez Zapatero explicó por qué. Primero, en reconocimiento a Carlos Chivite, el secretario general del PSN que falleció antes de poder ocupar su escaño en el Senado. Y, segundo, agradecer "el sacrificio" de los socialistas navarros cuando, siguiendo las instrucciones decididas en la sede del PSOE apoyaron un gobierno de Unión del Pueblo Navarro, partido aliado con el PP.
Aquella herida no ha cicatrizado del todo. La división persiste en el seno del PSN y su nuevo secretario general, Roberto Jiménez, fue elegido con el 65% de los votos. Zapatero les consoló diciendo que con su actuación han logrado imponer políticas progresistas y les vaticinó un seguro éxito en las elecciones del 2011.
