EHAK emplazó ayer a PNV, EA y EB a que demuestren de manera efectiva su rechazo a la ley de partidos y se nieguen a disolver el grupo parlamentario aberzale aunque el Supremo lo exija. Los nueve diputados de EHAK quieren que el legislativo se enfrente al tribunal, como ocurrió con el caso Atutxa, aunque esta postura derive en la inhabilitación de quienes desobedezcan.

La presidenta de la Cámara, Izaskun Bilbao (PNV), precisó que no tomará decisiones hasta que la sentencia se notifique al Parlamento. Sin embargo, el representante de EA en la Mesa, Rafael Larreina, adelantó que defenderá "la autonomía" del legislativo al igual que lo hizo su compañero Gorka Knörr, condenado como autor de un delito de desobediencia junto a Kontxi Bilbao (EB) y Juan María Atutxa (PNV).

El tripartito vasco y Aralar pidieron ayer a los ciudadanos vascos que firmen un documento en defensa de la consulta y de las iniciativas que adopten en foros internacionales. Sin embargo, no confirmaron si presentarán la demanda contra España en el Tribunal de Derechos Humanos, como pidió Ibarretxe.