A pesar de las constantes referencias a la desafección creciente de la política, todavía más de la mitad de los encuestados afirman que siguen la política española con mucho o bastante interés. Aunque en la muestra también se detecta que este interés tiende a decrecer, mientras que el grupo de los desinteresados va en aumento. Así, el porcentaje de los interesados se sitúa en el 52,5% y mantiene la tendencia a la baja que inició a principios del 2009, cuando se logró situar en el 61,3%. La política se sigue con mucho más interés en las zonas urbanas y, sobre todo más en las grandes ciudades que en el ámbito rural y los municipios más pequeños.