El Gobierno pidió ayer a Venezuela la extradición del etarra Arturo Cubillas, a instancias del juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco, que investiga la relación entre ETA y las FARC. El Ejecutivo de Hugo Chávez ya ha adelantado que no va a conceder la entrega porque no extradita a sus nacionales. Cubillas tiene la nacionalidad venezolana por matrimonio y ocupa un cargo en el Ministerio de Agricultura de ese país. Paralelamente, el juez Pablo Ruz reabrió ayer un caso de asesinato archivado desde 1992 en el que está implicado el etarra.

La decisión del Gobierno fue comunicada en el Consejo de Ministros por el vicepresidente primero, Alfredo Pérez Rubalcaba. En la nota oficial no se aclara si el Gabinete de José Luis Rodríguez Zapatero ha hecho caso de la sugerencia del juez Velasco, que propuso al Ejecutivo que pidiera a Chávez que retirara la nacionalidad a Cubillas, ya que si Venezuela rechaza la extradición no se podrá plantear de nuevo. De momento, la fiscalía venezolana ha citado a declarar al terrorista como testigo y la Audiencia Nacional lo ha convocado para el próximo 14 de diciembre.

El juez Ruz reabrió ayer el sumario del asesinato de Ángel Manuel Facal, en 1985 en San Sebastián, por el que han sido condenados tres miembros de la banda, y en el que estuvo imputado Cubillas. La causa se archivó en 1992.