El coordinador general de IU, Cayo Lara, ha desmarcado la decisión de su partido en Extremadura de facilitar con su abstención el Gobierno de esta comunidad al PP, en una comparecencia en la que ha anunciado que la presidencia federal de la coalición estudiará este martes si van a sancionar o no a los implicados. Lara ha querido dejar claro que la decisión de sus compañeros de Extremadura, que permitirá al candidato popular, José Antonio Monago, gobernar en esa comunidad, en lugar de al socialista Guillermo Fernández-Vara, "está fuera de la política federal". Ante esta situación, Lara, que ha negado que se haya planteado dimitir por lo sucedido, ha convocado con carácter urgente a la presidencia federal de IU para que analice lo ocurrido, aunque no ha evitado pronunciarse sobre la posibilidad de que se acuerden "expulsiones". "Es una palabra fuerte de la que, por ser tan delicada, no vamos a hablar hasta que se pronuncien los órganos correspondientes", ha manifestado. El secretario de organización del PSOE, Marcelino Iglesias, se ha mostrado dolido por la "lamentable" decisión de IU de facilitar la investidura de Monago y se ha preguntado cómo va a explicar la coalición esa medida contradictoria a sus votantes. Tras esta decisión, Iglesias ha reconocido que los socialistas tendrán que hacer autocrítica y reflexionar sobre la relación que ha mantenido con IU en lugares como Extremadura, donde hasta ahora la coalición de izquierdas no tenía representación. El presidente del Senado, Javier Rojo, también ha lamentado la decisión y ha acusado a Izquierda Unida de hacer lo "contrario" de lo que dice al facilitar que gobierne el PP en Extremadura. Al igual que el presidente andaluz, José Antonio Griñán, quien se ha mostrado convencido de que ningún votante de izquierdas habría dado su voto a IU para permitir que fuera la derecha, el PP, quien gobernara en Extremadura. El secretario general de ICV, Joan Herrera, ha considerado también un "error" la decisión de IU, y ha opinado que "no hay razón que lo justifique". Gobierno en minoría En contra de esas opiniones se han pronunciado varios dirigentes del PP como su portavoz en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, quien ha valorado que IU "haya dejado gobernar a quienes han querido los extremeños", así como que "mantenga la independencia y, sobre todo, la coherencia". El vicesecretario general de Comunicación del PP, Esteban González Pons, también se ha pronunciado en este sentido y ha recomendado a los socialistas que no utilicen dos varas de medir. Así, les ha recordado que, si los votos del PP son buenos para poder gobernar en Euskadi, este partido es "bueno" para dirigir la región extremeña. González Pons ha opinado que la decisión de los tres diputados de IU solo es una "consecuencia natural" del cambio producido en España tras las elecciones del 22 de mayo. Los extremeños han votado por el cambio porque no querían que "las cosas continuaran como hasta ahora", algo que "no entienden algunos", en alusión a los que "se oponían a los cambios" en la región y en el resto del Estado, ha añadido. Por otra parte, el secretario general de UGT en Extremadura, Francisco Capilla, ha dicho que la situación política de la región, con un futuro gobierno en minoría del PP, "requiere un ejercicio de responsabilidad de todas las partes" por el bien de los trabajadores extremeños.