El presidente de la Asociación de Clínicas Acreditadas para la Interrupción del Embarazo (Acai), Santiago Baranbio, considera que la decisión del Gobierno de reformar la ley del aborto es una "pésima noticia". Barambio asegura que la exigencia del consentimiento paterno en los casos de menores de edad que quieran abortar sería una medida "cosmética, de cara al ala más ultraderechista del PP", ya que afectaría a un número mínimo de mujeres.

Según un estudio realizado por Acai sobre 36.700 mujeres que habían abortado, solo 151 de ellas no lo habían notificado a sus tutores, por lo que esa medida afectaría a muy pocas mujeres y no sería muy contestada, según Barambio.

El estudio revelaba que el 87% de las mujeres acudían a abortar junto a sus padres, y que el 0,41% que no lo habían notificado a sus tutores se encontraban en un estado "de muy alta vulnerabilidad", ya que la mayoría no tenían padres, estaban en prisión o eran drogadictos, por lo que ninguna de ellas lo estaba haciendo "de manera frívola".

Donar órganos o casarse

Por su parte, la presidenta de la Federación de Mujeres Progresistas, Yolanda Besteiro, ha recordado que las jóvenes de 16 y 17 años ya pueden decidir "cuestiones vitales" como donar un órgano, someterse a una operación quirúrgica de riesgo o casarse (en este último caso incluso a edades inferiores) y, sin embargo, "no se les quiere dejar poner fin a un embarazo no deseado, algo que también puede afectar a estas jóvenes para el resto de su vida".

Según la presidenta de Mujeres Progresistas, esto supondría "un paso atrás" en la capacidad de las mujeres para decidir y "alejaría mucho" a España del entorno sociocultural y político de Europa. En este sentido, Besteiro ha defendido que la ley actual "viene a satisfacer los derechos reproductivos y sexuales de las mujeres, pone fin a un problema de inseguridad jurídica que afectaba tanto a las mujeres como a los profesionales y resuelve un problema de salud pública de primera magnitud".

Si la reforma que ha anunciado Gallardón ha sido calificada de "admirable" por la presidenta de la Comunidad y del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, por su parte, asociaciones de familia y provida han mostrado su "satisfacción" por el anuncio de Gallardón. Sin embargo, también han dicho que la ven "insuficiente" y esperan que sea solo "un primer paso" hacia la derogación de la misma.

Satisfacción

En este sentido, el presidente del Foro de la Familia, Benigno Blanco, ha asegurado estar "satisfecho" por que la promesa del Partido Popular se ha ratificado en sede parlamentaria aunque ha deseado que sea "una reforma ambiciosa" y "un paso de verdad, muy en serio" hacia la protección de la vida humana no nacida y, en definitiva, hacia la derogación de la actual ley del aborto.

Asimismo, el presidente del Instituto de Política Familiar, Eduardo Hertfelder, ha señalado que se trata de "un primer paso positivo" porque "empieza a restituir ese derecho a la vida que estaba y que se había eliminado en la última ley", aunque ha advertido de que la reforma anunciada es "claramente insuficiente" porque revisa la ley pero no la deroga.

Para otras asociaciones, el anuncio de Gallardón es una "chapuza, tomadura de pelo y decepcionante". Así lo ha calificado el coordinador general de la Asociación para el Derecho a la Objeción de Conciencia (ANDOC), José Antonio Díez. El único cambio en la ley de exigir el consentimiento paterno a las menores que quieran abortar "no va a contentar ni a los defensores del aborto ni a los que defienden el derecho a la vida", explica.

La reacción de esta asociación contraria a la interrupción voluntaria del embarazo no se ha hecho esperar y, en declaraciones a Europa Press, su coordinador ha manifestado que "es un parche que no va a servir para defender la vida ni para defender a los médicos que se niegan a abortar". Además, ha explicado que "no se van a disminuir los más de 100.000 abortos que se producen al año".