Asturias está en manos de un diputado, el de UPD, que no parece querer enfrentarse a la responsabilidad de escoger entre la izquierda y la derecha, elección que rompería la ambigüedad en la que se ha movido hasta ahora el joven partido de Rosa Díez, que se vende como punto medio entre el PSOE y el PP. Pese a invocar la estabilidad, el diputado de quien depende la gobernabilidad del principado, Ignacio Prendes, está retrasando su decisión a la espera de que los acontecimientos le eximan de tener que mojarse. Primera etapa de esta estrategia: proponer un Gobierno de concentración que socialistas y populares rechazaron de inmediato.

Tras reunirse con el candidato ganador de los comicios, el socialista Javier Fernández, Prendes hizo pública ayer su oferta de Ejecutivo unitario. El propio Fernández y la candidata del PP, Mercedes Fernández, que se reunieron horas después, coincidieron "plenamente" en descartar la opción de compartir Gabinete. Sí estuvieron de acuerdo en la necesidad de resolver "cuanto antes" la encrucijada, en aras de la estabilidad de la región. Ahora mismo, la derecha (Foro-PP) y la izquierda (PSOE-IU) están empatados a 22 escaños, en un Parlamento de 45.

Pese a sus proclamas a favor de la estabilidad, el PP no tiene prisa por cerrar un pacto con el Foro de Francisco Álvarez-Cascos. Primero, porque no se fía del exministro, que superó por segunda vez a su anterior partido en las urnas y dice estar dispuesto a ceder la presidencia autonómica si ello allana el pacto. Y segundo, porque podría ahorrarse el sapo de esta alianza con su directo competidor si UPD despeja la incógnita y se decanta por el PSOE.

Pero Prendes también especula y deja pasar el tiempo a la espera de cómo acaban las negociaciones Foro-PP. Si fracasan y el candidato socialista no tiene rival en el debate de investidura, UPD no tendrá que apoyarle porque Fernández podrá ser elegido por mayoría simple en segunda votación. Las únicas dudas que se han resuelto son que IU apoyará al aspirante del PSOE y que UPD, decida lo que decida, no entrará en ningún caso en el Gobierno asturiano.