El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha replicado a ETA que el Gobierno "jamás" va a negociar con una banda terrorista al tiempo que ha considerado "evidente" que la organización criminal no tiene intención de disolverse. El Ejecutivo ha respondido así al comunicado emitido este miércoles por la banda en el que asegura haber designado una delegación para abordar un diálogo directo con los Gobiernos de España y Francia.

"ETA no condiciona ya nuestros pasos ni nuestras vidas afortunadamente, la única comunicación que estamos exigiendo y esperando es la disolución incondicional ¿queda claro?", ha dicho el ministro desde la tribuna del Congreso de los Diputados en respuesta a la interpelación que le formuló Amaiur en relación a las medidas penitenciarias del Gobierno con los internos de ETA a los que la coalición abertzale se ha vuelto a referir "como presos vascos".

Fernández Díaz ha dicho que ETA y Amaiur "parecen las hojas de un mismo libro" ya que "siempre se producen coincidencias en el tiempo" entre "la propaganda de ETA" y las intervenciones de la coalición en la Cámara. "Es evidente que ETA no quiere disolverse incondicionalmente y sería bueno que ustedes que durante años les han jaleado sus crímenes y sus asesinatos, le exigieran la disolución incondicional", ha dicho.

De este modo ha respondido al último comunicado aseverando que "el Gobierno ni negocia, ni ha negociado, ni va a negociar jamás con una banda terrorista" ya que "para entregar las armas no hace falta diálogo, sino la voluntad para entregárselas". También ha rechazado la figura de los verificadores internacionales: "nos basta con la Guardia Civil y la Policía, díganselo ustedes a los señores de ETA: si de verdad se disuelven, nos sobran los verificadores".

¿Qué es disolución?

Al ser preguntado por Amaiur acerca del significado del concepto de disolución, el ministro se ha referido a "que ETA anuncie no sólo que cesa, sino que cesa de existir y que desmantela todas sus estructuras y a partir de ahí el Estado tiene instrumentos para verificar si esa decisión es cierta o no y para eso no necesita verificadores ni una negociación, que no la va a haber". Además Fernández Díaz ha añadido que su Departamento "sabe perfectamente cómo está ETA y que mantiene una estructura larvada en la clandestinidad y especialmente en el sur de Francia".

En cuando a la política de dispersión, el ministro ha comenzado criticando la expresión de "presos vascos", acuñada por Amaiur para referirse a los reclusos de ETA. "No insulte a la sociedad vasca; ni todos los presos que son vascos los son por ser de ETA, ni los que están por ser de ETA lo están por ser vascos, sino por ser delincuentes", ha aclarado.

Además, Fernández Díaz ha acusado a la izquierda abertzale de estar engañando a los presos de ETA al hacerles creer que tras el cese definitivo de ETA se iba a producir una negociación que iba a poner fin a la dispersión. "Yo le digo que están engañando a los presos, no hay ni habrá amnistía, ni acercamientos masivos, ni negociación, no se finalizará la política de dispersión mientras ETA no se disuelva incondicionalmente", ha zanjado.

El ministro del Interior ha dicho que hay presos que tienen voluntad de acogerse a esos programas de reinserción, pero que ETA no les permite que lo hagan y que, si Amaiur colaborase, les iría mucho mejor.

Según ha dicho, la política de dispersión tiene por objeto facilitar la reeducación y la reinserción de los presos de la banda y alejarlos de la presión que ejerce sobre ellos la propia banda y ha recordado que los presos que se acojan a los programas de reinserción "serán acercados y gozarán de beneficios siempre en función de lo que marca la ley", es decir la ruptura con la banda, el perdón a las víctimas, la asunción de las indemnizaciones y la colaboración de la Justicia.

"Unos van a las cárceles y otros a los cementerios"

El ministro ha finalizado su intervención en el Congreso destacando que la diferencia entre los familiares de ETA y las víctimas de la banda es que los segundos "van a visitar a sus familiares a los cementerios", mientras los primeros "van a las cárceles donde se respetan sus derechos".

En su última intervención en el Congreso de los Diputados, el portavoz de Amaiur, Iñaki Antigüedad, ha calificado el comunicado de ETA como "un paso más" y ha añadido que, aunque el Gobierno lo considere insuficiente, "si se dan pasos insuficientes concatenados, se llega a la suficiencia. Como no se llega es estando quieto".

En ese sentido le ha reprochado al ministro el uso del término disolución que ha llegado a describir como una "palabra chicle". "¿Qué demonios es disolución?", le ha interpelado para luego decir que "si es certeza de que no se va a repetir, el Gobierno debería poner los medios y estos no van a venir de las fuerzas de seguridad." "Si no se fía un pimiento de los verificadores, ¿se va usted a fiar de ETA si mañana dice en un comunicado que se disuelve?", ha insistido Antigüedad, quien ha llamado la atención acerca de que el IRA aún no ha emitido un comunicado de disolución.

En cuanto a la cuestión penitenciaria, Amaiur ha instado a que se tengan en cuenta "las circunstancias del momento actual" y ha defendido que quienes más sufren la dispersión son los familiares. A su juicio, "llevar a los presos a sus lugares de origen no se puede condicionar" y ha recordado durante el gobierno de Aznar "en un periodo de tregua trampa se acercaban presos.

Antigüedad ha enmarcado el Plan Integral de Reinserción del Ministerio en un "movimiento para ganar tiempo o porque se ha dado cuenta que no moverse en ciertos ámbitos lleva un mayor coste que moverse pese a que con ese movimiento está aguantando un coste". "Cuando entré en esta cámara, entré con convicciones y salgo con ellas: el mayor déficit que tiene este Gobierno no lo tiene en las cuentas públicas", ha dicho Antigüedad a modo de despedida.