Si en su primer encuentro informal, que tuvo lugar hace dos semanas en Múnich, los ministros de Interior de Francia y España hablaron en castellano y en catalán, ayer Manuel Valls ofreció la rueda de prensa solo en francés, a pesar de que todos los periodistas franceses presentes eran corresponsales y entendían el español.

Valls dijo sentirse "emocionado" por estar en España y contó que la "fuerza" e "historia" de Francia permiten que un "nacido en Barcelona" pueda llegar a ministro de Interior del país.