La dimisión de Carlos Dívar como presidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) no ha servido para tranquilizar los ánimos y hoy se espera otro tenso debate en el pleno de este organismo, en el que está previsto que se apruebe el plan de transparencia y austeridad. Además, la vocal Margarita Robles va a proponer en la sesión de esta mañana que todos los consejeros hagan públicos sus gastos. La mayoría se opondrá a este estriptís, según el también vocal José Manuel Gómez Benítez.

Fuentes de este organismo sostienen que se ha iniciado una caza de brujas entre los miembros del poder judicial a cuenta de los gastos de sus viajes oficiales o traslados a sus domicilios entre los vocales que no se desplazan porque viven en la capital y sus competencias se limitan a visitar juzgados en Madrid y los que tienen la obligación de recorrer los juzgados de España o asistir a encuentros internacionales.

Estos consejeros no entienden que se estén filtrando, desde dentro de la casa, datos sobre los desplazamientos del presidente en funciones, Fernando de Rosa, o de los vocales Félix Azón o Inmacula Montalbán. Uno de los más críticos es Gómez Benítez -que inició esta crisis al denunciar a Dívar por sus viajes-, porque piensa que la exhibición de estas actividades «es innecesaria». En su opinión, no se puede realizar «un escrutinio» del trabajo de los miembros del CGPJ porque sus gastos «no son homologables» a los que cargó Dívar al erario.

GRAN HERMANO / Los consejeros, según Gómez Benítez -el único que ha revisado las cuentas de sus colegas-, no han pasado al consejo facturas de sus gastos durante los fines de semana, al contrario de lo que hacía el expresidente. Por ello, lamentó esta especie de Gran Hermano en el que se está convirtiendo el poder judicial.

Esta postura no es compartida por Robles, que considera que si se hacen públicas las cuentas de los vocales, el CGPJ tendrá la autoridad «moral suficiente» para pedir «el mismo nivel de exigencia» al resto de administraciones públicas.

La propuesta de Robles no saldrá hoy adelante, aunque varios consejeros temen que finalmente acaben informando de sus gastos para evitar una campaña de descrédito que ponga fin a su carrera.

LAS NUEVAS NORMAS / En cambio, está previsto que se apruebe por unanimidad la nueva norma contable redactada por Ramón Camp. En ella se obliga a los vocales a viajar en clase turista en sus desplazamientos nacionales y en preferente si los vuelos duran más de tres horas, a alojarse en hoteles que no superen los 102 euros la noche y a identificar a las personas a las que se invita a comer o cenar. Y a aquellos que viven fuera de Madrid, solo se les pagará un billete a la semana para poder ir a ver a su familia, otro los festivos y en vacaciones.