El Partido Popular se ha limitado a señalar que respeta la decisión del juez Pablo Ruz de pedir que se investigue el borrado de los ordenadores de Luis Bárcenas porque ve indicios de delito en este hecho.
En un auto emitido hoy Ruz no descarta la "relevancia penal" en el borrado de los discos duros de los dos ordenadores del extesorero que el partido puso a disposición del juez que investiga la supuesta contabilidad B de los populares.
El juez acuerda que se investiguen los hechos por un juzgado de la Plaza de Castilla -al no ser competente la Audiencia Nacional- ya que entiende que concurren "indicios de la posible comisión del delito de encubrimiento o de daños informáticos".
Fuentes del PP consultadas por Efe han declinado opinar sobre la decisión del juez y se han limitado a subrayar el respeto del partido por las decisiones judiciales y su plena disposición a colaborar con la justicia.
A finales de agosto, el PP comunicó a la Audiencia Nacional que los discos duros de los dos ordenadores que Bárcenas tenía en la sede de la calle Génova se borraron cuando abandonó el partido.
El partido justificó entonces la destrucción de estos discos duros diciendo que, según un protocolo de almacenamiento y borrado de material informático acorde a la Ley de Protección de Datos, cuando una persona deja de usar un equipo se formatea y, en el caso de que por su cargo hubiera manejado información sensible, se destruye.
