Esta vez sí. Celia Villalobos, diputada del PP, vicepresidenta del Congreso y la dirigente conservadora que más a las claras ha dicho estar en contra de la reforma del aborto, ha votado este jueves, junto al PSOE y casi todo el resto de la oposición, a favor de retirar el polémico anteproyecto del ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón. La exministra de Sanidad no ha sido la única dentro de su partido que ha votado en el mismo sentido. También lo han hecho otros dos parlamentarios del PP, José Eugenio Azpiroz y Santiago Martínez, pero en su caso, según han explicado ellos mismos después, se ha debido a un error.

La votación de hoy no era secreta y en urna, como la de la proposición del PSOE del pasado martes, día en el que el grupo popular en la Cámara baja apenas mostró fisuras en su posicionamiento. Solo hubo dos abstenciones conservadores en esa ocasión. Ahora se trataba de una moción de Izquierda Plural que, al igual que la iniciativa de los socialistas, instaba a retirar la reforma. A pesar del apoyo de Villalobos, no ha salido adelante. El PP, con el apoyo de Unió y UPN, la ha rechazado.

Falsa unidad

El pasado miércoles, Villalobos ya dejó claro que una cosa era mostrarse en contra de la nueva regulación del aborto (que cambia el sistema de plazos por uno de supuestos muy restrictivos y aleja a España del contexto europeo en esta materia) y otra muy distinta apoyar a los socialistas. La presunta unanimidad de los conservadores, dijo, “no es real”, pero el PSOE intentó poner a prueba la cohesión del PP y eso, añadió, “une muchísimo”.