El Colectivo de Víctimas del Terrorismo (Covite) denunciará este lunes a ETA ante el Tribunal Penal Internacional de La Haya (TPI) por crímenes de lesa humanidad. Las víctimas solicitan a a la fiscalía del TPI que investigue a los dirigentes de Batasuna Arnaldo Otegi, Josepa Permach y Pernando Barrena, y a ocho destacados miembros de la banda terrorista. "La justicia en España deja muchísimo que desear", ha señalado la presidenta de Covite, Consuelo Ordónez, en una entrevista en la Cope.

Ordóñez ha lamentado que España no haya cambiado la calificación de los delitos cometidos por ETA desde el 2002, cuando entró en vigor el Estatuto de Roma del TPI. Además, ha incidido en que unos 400 de los más de 850 crímenes de la banda están sin resolver, de manera que, ha apuntado, "algo ha fallado en España".

Según la presidenta del colectivo, las víctimas se están "organizando" y "haciendo el papel que deberían haber asumido las instituciones hace muchos años". Ordóñez ha explicado que la querella se refiere a crímenes de lesa humanidad cometidos por ETA a partir del 2002, entre ellos asesinato, asesinato en tentativa, traslado de población forzosa y otros por motivos políticos y raciales.

"Estrategia del terror"

La denuncia apunta a personas concretas porque, ha destacado, son "altos responsables que han planificado la estrategia de terror" de la banda y los responsables de su brazo político. Junto a Ordólez, acudirá a presentar la denuncia el hermano del agente de la Policía Nacional asesinado por ETA Eduardo Puelles y los padres de Silvia Martínez, asesinada con solo 6 años en agosto del 2002.

Los once acusados por Covite son, además de Otegi, Permach y Barrena, los integrantes de la banda terrorista José Antonio Urritikoetxea, 'Josu Ternera'; José Luis Eciolaza, 'Dienteputo'; Tomás Elorriaga, 'Teo'; Juan Cruz Maiztegui, 'Pasto'; Eusebio Arzallus; Rafael Santiago Azcolain; Iratxe Sorzabal, y David Plá.