El expresidente de la Junta de Extremadura Juan Carlos Rodríguez Ibarra ha considerado este miércoles que el PSOE no ha sido capaz de elegir a un líder fuerte tras la marcha de Felipe González. "No hemos sido capaces de arreglar la sucesión", ha afirmado Ibarra en declaraciones a Onda Cero.

Según ha argumentado el que fuera uno de los barones con más peso en la ejecutiva socialista, cuando González era secretario general del PSOE "había una autoridad moral e incuestionable y nadie se ponía en contra" del líder. Ibarra ha realizado estas afirmaciones en relación a los últimos escándalos que han sacudido el partido: la destitución de Tomás Gómez al frente del PSM y la imputación de Manuel Chaves y José Antonio Griñán en el Supremo por el 'caso ERE'.

"(Joaquín) Almunia no tenía la competencia que tenía Felipe. A partir de ahí, hemos venido dando tumbos, y todavía no hemos sido capaces de arreglar la sucesión de Felipe González", ha destacado en declaraciones a Onda Cero.

En concreto, sobre la imputación de Chaves y Griñán, Ibarra ha esgrimido la presunción de inocencia y ha afeado que tanto el actual secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, como la líder del partido en Andalucía, Susana Díaz, "han intentado ir de justicieros por la vida, intentando levantarse sobre el hombro de los demás para sobresalir". Y respecto de la destitución de Gómez, el expresidente extremeño ha considerado que el caso del tranvía de Parla "no parece ser la razón" de su relevo y que si los malos resultados en las encuestas han sido el motivo, esta decisión debería de "aplicarse" también con otros candidatos.

Finalmente, Ibarra ha advertido del duro papel que tiene el PSOE ante un escenario de pactos políticos tras las elecciones si, como auguran todos los sondeos, no hay un vencedor claro. "Si pacta con el PP puede entrar en un desfiladero peligrosísimo y si pacta con Podemos puede ser la desaparición", ha concluido.