El ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, replicó ayer al entrenador de fútbol Pep Guardiola. Un día antes, el entrenador del Manchester City consideró «una gran injusticia» las comparaciones entre el procés y ETA y la kale borroka. Zoido evitó vincular el movimiento por la independencia de Cataluña con el terrorismo etarra, pero argumentó que el «acoso» a los que no comulgan con esta causa constituye «violencia». «Intentar imponer un proyecto excluyente a la mitad de la población por las bravas no es democrático -dijo Zoido-. Acosar a jueces, a periodistas, a policías y a todo el que no comulgue con el independentismo es violencia. Como lo es intentar presionar a jueces y fiscales y enfrentarse con la policía».

El pasado viernes, Guardiola, una de las figuras más destacadas del proceso independentista, dedicó al análisis de la actualidad catalana buena parte de su rueda de prensa previa al partido entre el Manchester City y el Everton. «Cuando dicen que somos generadores de violencia se equivocan de lleno. Puedes estar de acuerdo o no, ya sabemos que las ideas son de cada uno y también los jueces pueden hacer su trabajo, pero creo que es una gran injusticia que nos comparen con ETA o con la kale borroka», dijo el técnico, luciendo el lazo amarillo por el que fue multado con 22.500 euros por la federación inglesa de fútbol.

Ese mismo día, el secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, sí comparó los Comités de Defensa de la República (CDR) con la violencia callejera asociada a ETA. A su juicio, estos organismos suponen el «germen de la kale borroka». «No nos intimidarán», señaló este viernes el homólogo de Ábalos en el PSC, Salvador Illa. En los últimos meses, los socialistas catalanes han contabilizado más de medio centenar de ataques a sus sedes (con mensajes como Fuera de Cataluña, Puta España y Españoles maricones), así como insultos y agresiones a dirigentes y cuadros del partido. Entre ellos, el primer secretario, Miquel Iceta, y la portavoz del PSC en el Congreso de los Diputados, Meritxell Batet.

«Hacemos un llamamiento a un clima de respeto y pedimos que todo el mundo se exprese y manifieste respetando el orden público y la convivencia», dijo el secretario de Organización del PSC. Los socialistas catalanes intentaron en el último pleno sacar adelante una resolución de condena de los «actos violentos», pero fue rechazada por la mayoría independentista.